La parentificación crea un problema para los miembros de la pareja, que se puede manifestar en diferentes formas.
La parentificación es algo de lo que mucha gente rehuiría si se le contara de qué trata, pero que, irónicamente, varios caen en ella sin saberlo. ¿Qué es la parentificación?
Comencemos por decir que en una pareja lo ideal es hacer equipo, apoyarse mutuamente en las buenas y en las malas. Nunca, por ningún motivo, será recomendable depender de la pareja, cosa distinta al amor y a un vínculo sano.
La parentificación nombra a aquello que sucede cuando una de los miembros de la pareja empieza a depender del otro para llevar una vida adulta. Es decir, el individuo que termina “adoptado” puede llegar a no enfrentar las responsabilidades que le tocan sin la ayuda de su pareja.
Quien toma el papel del “padre” o “madre” en una relación sentimental es la persona que asume la organización y toma las decisiones que corresponden a ambos.
El problema
El problema es para ambos. Por una parte, quien busca cuidar de su pareja a niveles que terminan por incapacitar al otro hace un daño al nutrir esa dependencia y falta de integridad. Esa misma persona, que toma el rol parental, por lo común relega sus propias necesidades a segundo plano, con tal de satisfacer a las de su compañero. Esto es casi como la abnegación de una madre.
A la larga la situación salta, porque el del rol parental se da cuenta que no está bien hacerse cargo enteramente de asuntos que corresponden a otro o ambos, sin mencionar que la persona protegida se ve reducida a un nivel de madurez casi pueril.
¿Qué hacer?
Por supuesto que lo más importante es darse cuenta del problema. ¿Cómo? Tal vez notando un agotamiento emocional, aspecto que deriva en ansiedad, frustración y desgaste por llevar toda la carga sobre un solo par de hombros.
Lo más recomendable sería buscar apoyo terapéutico por el bien individual y de la pareja. Así, se pueden encontrar otras dinámicas de organización que construyan nuevas formas de comunicación. Al tiempo, establecer límites claros es fundamental.