Cumplir un reto de lectura suena sencillo en papel, pero en la práctica suele competir con el trabajo, el cansancio y la falta de tiempo. Cada inicio de año está lleno de buenas intenciones y listas ambiciosas que, con el paso de los meses, terminan abandonadas. Sin embargo, leer más no tiene por qué convertirse en una fuente de frustración ni en una obligación académica.
Un buen reto de lectura se construye con hábitos realistas, elecciones inteligentes y, sobre todo, con placer. No se trata de cuántos libros presumas haber leído, sino de mantener una relación constante con las historias y las ideas. Estos tips están pensados para ayudarte a llegar a 2026 leyendo más, mejor y con ganas de seguir haciéndolo.
1. Define un reto realista (y honesto)
Antes de pensar en cuántos libros vas a leer, piensa en cómo lees. No es lo mismo alguien que devora novelas en una semana que quien apenas puede leer diez páginas antes de dormir. Un reto mal planteado es la forma más rápida de abandonar.
Empieza con una cifra alcanzable. Si lees 12 libros al año, proponte 18 o 20, no 50. El reto debe motivarte, no castigarte. Siempre habrá tiempo de ajustar la meta si descubres que puedes ir más lejos.
2. Elige libros que realmente quieras leer
Uno de los errores más comunes es llenar la lista de “libros importantes” que sientes que deberías leer, pero que en realidad no te interesan. Eso convierte la lectura en una obligación más.
Tu reto debe incluir placer. Novela negra, terror, ciencia ficción, ensayo, biografías, cómic: todo cuenta. Leer lo que te gusta es la mejor forma de crear el hábito y mantenerlo vivo durante todo el año.
3. Mezcla libros largos con lecturas cortas
Si tu lista está llena de novelas de 800 páginas, es probable que te estanques a mitad de año. La clave está en alternar ritmos y formatos para no saturarte.
Después de un libro denso, elige uno corto o más ligero. Cuentos, novelas breves o ensayos ágiles funcionan como “respiros” que te devuelven el entusiasmo y te hacen sentir que avanzas.
4. Establece un momento fijo para leer
La lectura mejora cuando tiene un lugar en tu rutina. No hace falta dedicar horas: 20 o 30 minutos diarios pueden marcar una diferencia enorme al final del año.
Elige un momento que puedas sostener: antes de dormir, al despertar, durante el café de la mañana o en el transporte. Cuando la lectura se vuelve un hábito, deja de depender de la motivación.
5. Lleva un registro simple de tus lecturas
Anotar lo que lees ayuda más de lo que parece. No se trata de hacer reseñas complejas, sino de tener un registro que te recuerde cuánto has avanzado.
Puede ser una libreta, una app o una nota en el celular. Apunta títulos, fechas y una frase sobre lo que te dejó cada libro. Ver la lista crecer es una motivación poderosa.
6. No abandones un libro solo por culpa
Hay libros que simplemente no conectan contigo, y eso está bien. Forzarte a terminar algo que no disfrutas suele llevarte a dejar de leer por completo.
Darte permiso para abandonar un libro es una forma de cuidar tu reto. El tiempo de lectura es valioso; inviértelo en historias que te atrapen y te den ganas de seguir.
7. Aprovecha distintos formatos de lectura
Leer no siempre significa cargar un libro físico. Los ebooks y audiolibros pueden ser grandes aliados, especialmente cuando el tiempo escasea.
Un audiolibro durante una caminata o mientras manejas también cuenta. Lo importante es mantener el contacto con las historias y adaptar la lectura a tu ritmo de vida.
8. Diseña tu reto por estaciones del año
No lees igual en enero que en octubre. Aprovecha eso a tu favor y planea lecturas según el ánimo de cada temporada.
Libros ligeros o de aventura para el verano, novelas más densas o introspectivas para el invierno. Pensar el reto como un recorrido anual lo vuelve más atractivo y menos monótono.
9. Comparte tu reto con alguien más
Hablar de lo que lees refuerza el hábito. No hace falta un club formal: basta con un amigo, una pareja o un grupo pequeño con intereses similares.
Compartir recomendaciones, comentarios o avances crea una sensación de compromiso sano. Además, escuchar otras opiniones puede llevarte a libros que jamás habrías elegido por tu cuenta.
10. Recuerda por qué empezaste
Habrá semanas en las que no leas nada y días en los que el cansancio gane. Eso no significa que hayas fracasado, solo que eres humano.
Vuelve a la razón inicial de tu reto: desconectar, aprender, disfrutar, pensar mejor. La lectura no es una carrera; es una compañía. Si mantienes eso claro, llegar a diciembre con tu reto cumplido será una consecuencia natural.
Reto de lectura Esquire 2026: 24 libros en 12 meses
El objetivo es leer 24 libros en el año (un promedio de dos al mes), combinando géneros, extensiones y formatos. Puedes adaptar cada consigna a tu biblioteca personal, a novedades editoriales o a clásicos pendientes. Si lees más, mejor; si lees menos un mes, se compensa en otro.
Enero – El arranque correcto
1. Un libro corto (menos de 200 páginas)
Empieza el año con una lectura ágil que te recuerde lo bien que se siente terminar un libro. Ideal para crear inercia y motivación.
2. Un libro que tengas pendiente desde hace años
Ese título que siempre te prometes leer y nunca llega el momento. Enero es el mes perfecto para saldar esa deuda.
Febrero – Leer por puro gusto
3. Un libro del género que más disfrutas
Novela negra, terror, fantasía, ciencia ficción, ensayo: elige sin culpas y sin pretensiones.
4. Un bestseller que genere conversación
No para seguir la moda, sino para entender por qué todo el mundo habla de él.
Marzo – Expandir horizontes
5. Un autor o autora que nunca hayas leído
Descubrir nuevas voces mantiene la lectura fresca y evita la repetición.
6. Un libro de no ficción
Biografía, crónica, historia, ciencia o filosofía. Algo que te saque de la narrativa tradicional.
Abril – Clásicos y raíces
7. Un clásico universal
No importa si es breve o extenso: lo importante es enfrentarlo sin miedo.
8. Un libro publicado antes de 1980
Una forma de leer con otra cadencia y otro contexto cultural.
Mayo – Ritmo y entretenimiento
9. Un libro que se lea “de un jalón”
Ideal para recuperar velocidad lectora y recordar el placer de no querer soltar el libro.
10. Un thriller, novela policial o de misterio
La narrativa de tensión es perfecta para este mes.
Junio – Lecturas personales
11. Un libro recomendado por alguien cercano
Leer desde la confianza y la conversación.
12. Un libro relacionado con uno de tus intereses personales
Música, deporte, cine, historia, viajes, gastronomía: todo cuenta.
Julio – Formatos alternativos
13. Un audiolibro o ebook
Ideal para vacaciones, trayectos largos o caminatas.
14. Un libro de cuentos o relatos
Perfecto para leer en fragmentos sin perder continuidad.
Agosto – Viajar leyendo
15. Un libro ambientado en otro país o cultura
Leer también es una forma de viajar sin moverte.
16. Un libro escrito originalmente en otro idioma
Aunque lo leas traducido, busca una voz distinta.
Septiembre – Volver a pensar
17. Un ensayo breve o libro reflexivo
Una lectura que dialogue contigo y con el momento vital que atraviesas.
18. Un libro que te incomode o rete
No todo tiene que ser cómodo: leer también es confrontarse.
Octubre – El lado oscuro
19. Un libro de terror, suspense o tema oscuro
Ideal para acompañar el ambiente del mes.
20. Un libro con atmósfera intensa
Más allá del género, busca una lectura que construya mundo y sensaciones.
Noviembre – Mirar hacia atrás
21. Un libro que releas
Volver a un texto conocido es una experiencia distinta con el paso del tiempo.
22. Un libro publicado en 2026
Conectar con el presente editorial y cerrar el año actualizado.
Diciembre – Cierre sin presión
23. Un libro corto o ligero
Para terminar el año leyendo, no corriendo contra el reloj.
24. El libro que tú quieras
Sin reglas. Sin consignas. Solo placer lector.
Regla de oro del reto
Si un libro no te atrapa, puedes cambiarlo sin culpa. El reto no es terminar listas, sino sostener el hábito y disfrutar el camino.