“El Eternauta”: final explicado de la intrigante serie de ciencia ficción de Netflix

El Eternauta cerró su primera temporada manteniéndose fiel al espíritu de la historieta: una reflexión sobre la resistencia, la identidad y los límites del control.

el-eternauta-final-explicado-serie-netflix.jpg

NETFLIX

La primera temporada de El Eternauta, la ambiciosa producción argentina de ciencia ficción protagonizada por Ricardo Darín, cerró su ciclo en Netflix dejando al público en vilo. Con una mezcla de tensión apocalíptica y manipulación mental, el desenlace abre nuevas puertas dentro de un universo tan perturbador como fascinante.

La calma antes del caos: una traición desde dentro

Todo parecía estabilizarse en el refugio donde Juan Salvo y su grupo de sobrevivientes planeaban su próxima jugada contra la invasión alienígena. Pero la aparente paz se rompió con un estallido de violencia. Lucas, un miembro clave del grupo, tuvo un repentino brote psicótico que lo llevó a asesinar a un compañero y luego quitarse la vida.

La escena, ambientada frente a la enigmática luz azul del estadio Monumental, marcó un punto de inflexión. Las frases delirantes de Lucas —sobre “la fundación” y el control mental— fueron una advertencia siniestra: algo o alguien estaba manipulando las mentes de los humanos.

Clara, la hija que ya no es la misma

El regreso de Clara, la hija de Juan, es uno de los momentos más inquietantes del episodio final. Su aparición, sin heridas y con lagunas en su memoria, siembra dudas inmediatas. Niega haber llevado objetos que claramente tenía consigo, como una máscara, lo que sugiere una intervención externa.

La confirmación llega en la última escena: Clara, inexpresiva y armada, entrena en Campo de Mayo bajo órdenes desconocidas. Todo indica que ha sido controlada por la misma fuerza que afectó a Lucas, y que el verdadero enemigo es capaz de borrar recuerdos y reconfigurar identidades.

Un ejército alienígena a la vista: ¿quién mueve los hilos?

En su intento por descubrir la fuente de la amenaza, Juan y Franco se topan con una imagen aterradora: frente al estadio de River Plate, una formación de humanos y criaturas alienígenas marchando en perfecta sincronía.

En el centro del estadio, iluminado por una luz azul, se revela una figura híbrida, humanoide y alienígena, con manos alargadas y múltiples dedos. Franco lo resume de manera escalofriante: “Esa cosa los controla. Son como robots”.

La invasión, entonces, no se da con fuego ni explosiones, sino con control mental, obediencia ciega y pérdida de voluntad.

¿Qué viene después? Una segunda temporada en el horizonte

Aunque Netflix no ha confirmado oficialmente una segunda temporada, las declaraciones de Ricardo Darín y el director Bruno Stagnaro apuntan en esa dirección. El material original del cómic de Héctor Germán Oesterheld todavía tiene mucho por explorar.

“Todavía tenemos la segunda parte de El Eternauta por delante. ¡Creo que vamos a apuntar más alto!”, anticipó Darín en una entrevista. Las dudas que quedan —la naturaleza de la criatura del estadio, los deja vu de Juan, el destino de Clara— preparan el terreno para una continuación aún más intensa.

Un final inquietante para una historia que apenas comienza

El Eternauta cerró su primera temporada manteniéndose fiel al espíritu de la historieta: una reflexión sobre la resistencia, la identidad y los límites del control. En un mundo donde el enemigo no siempre se ve, y donde las mentes pueden ser el verdadero campo de batalla, la lucha de Juan Salvo recién empieza.

¿Estás preparado para lo que viene?

Te interesará
El Festival de Cine de Sundance CDMX presentará lo mejor del cine independiente en cuatro sedes de Cinépolis
Netflix Tudum 2025 llega con todo, prometiendo grandes revelaciones y un en evento que va en ascenso
Publicada por primera vez en 1957, ‘El Eternauta’ es una obra fundamental dentro de la cultura geek y el cómic latinoamericano.
Todo indica que Marvel vuelve a usar las escenas post créditos como piezas del rompecabezas que arman su extenso universo cinematográfico.
Son organizados, sigilosos y, aunque ahora parezcan inofensivos, las pistas apuntan a que podrían estar relacionados con hechos mucho más oscuros.