Evita estos quesos si buscas perder peso: Guía definitiva para hacer elecciones más saludables

Si buscas perder peso, no todos los quesos son tus aliados. Descubre cuáles evitar y cuáles pueden ser parte de una dieta saludable sin sacrificar sabor

Various Cheeses

Evita estos tipos de quesos si quieres conseguir perder peso

Getty Images

Los quesos son uno de los alimentos más versátiles y deliciosos que existen, y forman parte fundamental de la dieta en muchas culturas. Elaborados a partir de leche, cuajo y sal, ofrecen una amplia variedad de sabores, texturas y valores nutricionales. Sin embargo, si tu objetivo es perder peso, no todos los quesos son tus mejores aliados. Algunos tienen un contenido de grasas saturadas y calorías tan elevado que pueden dificultar la pérdida de peso. En esta guía, te mostramos los tipos de quesos que debes evitar si buscas cuidar tu figura y, además, te damos alternativas saludables para seguir disfrutando de este placer culinario sin remordimientos.

¿Por qué es importante elegir bien el queso a la hora de perder peso?

Aunque el queso es una excelente fuente de proteínas, calcio y otros nutrientes esenciales, su alto contenido en grasa, particularmente grasa saturada, puede hacer que sea difícil de encajar en una dieta enfocada en la pérdida de peso. Los quesos curados y procesados, en especial, contienen más calorías y sodio, lo que puede contribuir a la retención de líquidos y al aumento de peso. Por eso, si tu objetivo es reducir calorías, moderar el consumo de ciertos quesos es clave.

Los quesos que debes evitar si quieres perder peso

1. Quesos procesados
Los quesos procesados, como las lonchas de queso americano o los untables, suelen tener un contenido mucho más elevado de sodio y grasa que los quesos naturales. Además, contienen aditivos y conservantes que no solo pueden afectar negativamente a tu salud, sino que también pueden interferir en tu objetivo de perder peso.

  • Alto contenido en sodio: El exceso de sodio puede provocar retención de líquidos e hinchazón, lo que puede hacer que te sientas más pesado de lo que realmente estás.
  • Mayor contenido de grasas saturadas: Estos quesos contienen un porcentaje elevado de grasas saturadas, lo que puede incrementar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y dificultar la pérdida de peso.
  • Menor valor nutricional: Debido a su procesamiento, estos quesos suelen perder gran parte de los nutrientes naturales, como vitaminas y minerales, haciéndolos una opción menos nutritiva.

2. Mascarpone
El mascarpone es famoso por su textura suave y cremosa, lo que lo convierte en un ingrediente estrella en postres como el tiramisú. Sin embargo, si tu objetivo es perder peso, este queso no es la mejor elección.

  • Alto contenido calórico: Con una gran cantidad de grasa en cada porción, el mascarpone puede añadir calorías rápidamente a tu dieta.
  • Grasas saturadas: La mayoría de las calorías que provienen del mascarpone son de grasas saturadas, que pueden no solo dificultar la pérdida de peso, sino también incrementar el riesgo de enfermedades del corazón.
  • Poco saciante: A pesar de ser altamente calórico, este queso no proporciona una sensación prolongada de saciedad, lo que puede llevar a comer en exceso.

3. Gruyère
Aunque el Gruyère es delicioso en fondue o gratinados, su alto contenido en grasa lo convierte en una opción poco favorable para quienes buscan perder peso.

  • Alto en grasas y calorías: Una pequeña porción de Gruyère contiene una cantidad significativa de calorías debido a su alto contenido de grasa, lo que puede sabotear tus esfuerzos por controlar tu ingesta calórica diaria.
  • Grasas saturadas: Al igual que el mascarpone, el Gruyère también es rico en grasas saturadas, que se asocian con problemas cardiovasculares si se consumen en exceso.

4. Limburger
El Limburger es un queso con un sabor fuerte y un olor característico. Si bien es apreciado por su intensidad, no es una opción ideal para aquellos que intentan bajar de peso.

  • Rico en calorías: Al ser un queso madurado, tiene un alto contenido en grasa, lo que lo convierte en una opción calórica.
  • Grasas saturadas y sodio: Además de su riqueza en grasas saturadas, el Limburger también contiene bastante sodio, lo que puede provocar retención de líquidos y dificultar el control del peso.

5. Cheddar
El cheddar es uno de los quesos más populares, pero su alto contenido en grasa y sodio lo convierte en un enemigo de las dietas para perder peso.

  • Grasa y calorías: Aunque delicioso, el cheddar es graso y denso en calorías, lo que puede dificultar la reducción de calorías diarias si no se consume con moderación.
  • Sodio elevado: El alto contenido de sodio del cheddar puede contribuir a la hinchazón y a una mayor retención de líquidos, dos factores que no ayudan a la pérdida de peso.
Hard cheese on white

¿Por qué es importante elegir bien el queso?

R.Tsubin/Getty Images

Alternativas saludables a los quesos grasos

Si bien algunos quesos pueden dificultar la pérdida de peso, no todos son malos para tu dieta. Aquí te dejamos algunas alternativas más saludables que puedes incorporar sin sacrificar sabor ni nutrientes:

1. Queso fresco
Este tipo de queso es bajo en grasa y alto en proteínas, lo que lo convierte en una opción excelente para quienes buscan perder peso. Es ideal para untar en pan o añadir a ensaladas y postres ligeros.

2. Mozzarella
Conocida por ser baja en grasa y una buena fuente de calcio, la mozzarella es perfecta para ensaladas, pizzas y sándwiches. Al ser ligera, es una excelente opción para incluir en una dieta baja en calorías.

3. Queso cottage
El queso cottage es otro aliado para la pérdida de peso. Es bajo en grasa, alto en proteínas y puede ser una excelente opción para desayunos o meriendas. Además, combina perfectamente con frutas para un snack saludable.

4. Queso feta
Este queso es bajo en grasa y rico en calcio, lo que lo hace ideal para platos mediterráneos como las ensaladas griegas. Su sabor fuerte te permite usar menos cantidad, lo que ayuda a controlar las porciones.

5. Queso de cabra
El queso de cabra tiene menos grasa que muchos otros quesos y un sabor único que lo hace perfecto para añadir a ensaladas o untar en pan.

El queso puede ser parte de una dieta equilibrada, incluso si estás tratando de perder peso. La clave está en elegir quesos más ligeros y consumirlos con moderación. Evitar quesos grasos y procesados es un buen primer paso, pero también puedes disfrutar de alternativas saludables que te permitirán alcanzar tus objetivos sin renunciar al placer de comer queso.

Editor Digital de Esquire México.
>> Te puede interesar
¿Quién dijo que perder peso era aburrido? Descubre cómo cada beso, caricia y orgasmo pueden ayudarte a quemar calorías y mejorar tu bienestar
Las erecciones nocturnas y matutinas son mucho más que un fenómeno común para los hombres; son un indicador clave de la salud vascular y del sistema de erección
El consumo excesivo de proteínas, tan común hoy en día entre quienes buscan aumentar su masa muscular, puede tener consecuencias graves para la salud
La vida sexual de las parejas casadas cambia a lo largo de los años, dependiendo de la edad y otras variables. Aquí analizamos con qué frecuencia hacen el amor las parejas casadas según su edad, y cómo la calidad y cantidad del sexo varían con el tiempo