Atrás quedó la idea de que solo las mujeres deben cuidar su aspecto. Hoy, los hombres saben que una buena imagen puede abrir puertas en el ámbito profesional, mejorar las relaciones personales y, por qué no, subir la autoestima. Y la buena noticia es que solo necesitas diez minutos al día para verte mejor. Aquí te dejamos los 8 cuidados esenciales que deberías incorporar a tu rutina diaria.
Higiene corporal: empieza el día con frescura
Nada como una ducha por la mañana para activarte y dejar una buena impresión desde el primer saludo. Pero cuidado, usar jabón en todo el cuerpo a diario puede resecar la piel. ¿La clave? Un gel con pH entre 5,5 y 6, aplicándolo especialmente en axilas, pies, ingles y partes íntimas. No olvides el desodorante y, si tu piel lo pide, una crema hidratante ligera.
Pelo limpio, imagen ganadora
El cabello masculino tiende a ser más graso. Si usas productos como ceras o haces ejercicio, el lavado diario puede ser tu mejor aliado. Eso sí, si lo haces todos los días, una sola enjabonada basta. Si lo haces día por medio, mejor dos. Y nunca subestimes el poder de un buen peinado.
Afeitado con estilo (y sin drama)
Un buen afeitado no empieza con la cuchilla, sino con la preparación de la piel. Usa aceite previo, espuma de afeitar de calidad, y asegúrate de que las cuchillas estén limpias y afiladas. Afeita en dirección del crecimiento del vello y termina con un after shave hidratante. Resultado: piel suave, sin irritaciones ni cortes.
Barba cuidada, barba respetada
Si llevas barba, no basta con dejarla crecer. Hay que lavarla e hidratarla con productos específicos. ¿Un tip profesional? Trátala como tratarías el cuero cabelludo. Y claro, visita al barbero de vez en cuando para mantener la forma y el estilo.
Limpieza facial: tu nuevo mejor amigo
La cara lo dice todo. Y si quieres que diga “me cuido”, empieza con un gel facial adecuado para tu tipo de piel. Limpia los restos de sudor, grasa y toxinas, sobre todo después de entrenar o de un día largo. Este paso es clave para prevenir imperfecciones y retrasar el envejecimiento.
Hidratación: el secreto de la juventud
Si solo puedes dedicar tiempo a una parte del cuerpo, que sea el rostro. Una buena crema hidratante facial repara el daño del afeitado y mantiene la piel saludable y joven. Suma un contorno de ojos para combatir ojeras y bolsas, y no te olvides del bálsamo labial. ¿Nivel avanzado? Añade un sérum por la mañana y una crema antiedad por la noche.
Sonríe sin miedo: higiene bucal al día
Tu sonrisa dice más que mil palabras, así que mantenla impecable. Cepilla tus dientes después de cada comida y usa hilo dental al menos una vez al día. También es buena idea incluir un enjuague bucal y visitar al dentista con regularidad. Nadie quiere tener que huir de tu aliento.
Manos impecables, presencia imbatible
Sí, las manos también hablan. Las uñas descuidadas o la piel agrietada pueden arruinar toda tu imagen. Lávalas con frecuencia, mantené las uñas a una longitud adecuada y aplica crema hidratante, sobre todo si trabajas con ellas o las expones al clima.
Bonus: constancia, tu mejor hábito
Incorporar estos cuidados puede parecer mucho al principio, pero recuerda: solo necesitas tres semanas para formar un hábito. Una vez que te acostumbras, se vuelve parte de tu rutina, como tomar café por la mañana. Y lo mejor: los resultados se notan.