La Fórmula 1 no solo es velocidad, estrategia y drama en cada curva. También es espectáculo, y en 2025 ese espectáculo va más allá de la pista con F1, la película protagonizada por Brad Pitt, que se estrena este 26 de junio. Dirigida por Joseph Kosinski (Top Gun: Maverick) y producida por Jerry Bruckheimer, esta cinta promete llevarnos al corazón de las carreras como nunca antes... con Checo Pérez, Max Verstappen y compañía compartiendo cámara con Sonny Hayes, el veterano piloto interpretado por Pitt.
Un comeback de película
La historia de F1 arranca en los años 80, donde Sonny Hayes —una especie de rockstar caído de la velocidad— se convierte en leyenda por breves destellos, hasta que se retira de las pistas. Años más tarde, regresa del retiro para rescatar a la escudería ficticia APXGP, que atraviesa horas bajas. ¿Suena a cliché? Tal vez. ¿Funciona en el universo F1? Definitivamente. Porque aquí, la nostalgia de Lotus y los ecos de Ayrton Senna se mezclan con la brutalidad tecnológica y mediática de la temporada 2024. Y ahí es donde entra la magia.
Checo Pérez: de Red Bull al celuloide
Aunque 2024 marcó el adiós de Checo Pérez a Red Bull, F1 le ofrece un último stint en la elite, pero esta vez, en el plano cinematográfico. El mexicano aparece en varias escenas clave, incluida la formación previa al GP de Gran Bretaña, donde comparte plano (y protocolo) con Brad Pitt, Fernando Alonso, Charles Leclerc, Max Verstappen y más.
Su presencia no es decorativa. Se le ve en acción, rueda a rueda con el monoplaza de Hayes, en escenas filmadas en Silverstone y Las Vegas. Para los fans, es una joya ver al tapatío llevar la adrenalina de la pista al mundo del cine, aunque sea por unos segundos.
Los cameos que valen una pole
Pitt no corre solo. A su lado —literalmente— están nombres de peso como:
Charles Leclerc (Ferrari)
Carlos Sainz (Ferrari)
Lando Norris (McLaren)
Fernando Alonso (Aston Martin)
Max Verstappen (Red Bull)
Alex Albon (Williams)
Esteban Ocon (Alpine)
Algunos como Leclerc, Sainz y Norris incluso tienen diálogos. Otros, como Ocon, protagonizan escenas de tensión con Sonny Hayes. Lo cierto es que la convivencia entre el elenco real de la F1 y el universo ficticio de APXGP se siente fluida y auténtica. No son extras: son parte del ADN de la historia.
Rodaje en tiempo real: cuando el cine no frena por nada
El gran diferenciador de F1 es que se filmó durante la temporada real 2024, en medio del caos organizado de ocho Grandes Premios. Sí, Brad Pitt estuvo allí, bajo el sol de México, en la lluvia de Spa y bajo los reflectores de Las Vegas. Todo con monoplazas reales —modificados especialmente— y cámaras que capturan desde la pista lo que antes solo veíamos desde la tribuna o en la transmisión.
Grandes Premios donde se filmó:
Silverstone (Gran Bretaña)
Monza (Italia)
Las Vegas (Estados Unidos)
Suzuka (Japón)
Ciudad de México (México)
Spa-Francorchamps (Bélgica)
Hungaroring (Hungría)
Yas Marina (Abu Dhabi)
Sí, hubo drama, velocidad y hasta celebraciones falsas en la zona del estadio del Autódromo Hermanos Rodríguez. Y sí, muchos fans se tragaron el anzuelo: Brad Pitt ganando en México. Hollywood, baby.
¿Vale la pena verla?
F1 es cine para los fanáticos del automovilismo, pero también para quienes aman una buena historia de redención con olor a gasolina. La presencia de Checo, los cameos de la élite del deporte, y la filmación en Grandes Premios reales convierten a esta película en una cápsula única de lo que fue la temporada 2024, envuelta en el espectáculo hollywoodense de una historia que pisa el acelerador sin mirar atrás.
Así que si alguna vez soñaste con ver a Brad Pitt en una parrilla junto a Max Verstappen y Checo Pérez, este es tu momento. Porque, aunque esto sea ficción, joder, esto es cine.
¿Listo para la vuelta de formación? El semáforo se apaga el 27 de junio. Y esta vez, los asientos del cine huelen a goma quemada.