Te presentamos una guía sobre el phubbing, partiendo de saber qué es hasta llegar a sencillos consejos para sobreponerte al problema.
El phubbing, a pesar de que el nombre parece que sugiere algo desconocido para muchos, es una cosa bastante común que, incluso, muy probablemente, tú has aplicado a otras personas. Se le ve a modo de contradicción en un tiempo donde nos mantenemos comunicados con mucha facilidad, sin importar distancias u otros obstáculos.
¿Qué es el phubbing?
En realidad no estamos hablando de un fenómeno emergente, sino de uno ya instalado en la sociedad y hasta normalizado.
El término se acuñó desde 2012, cuando una agencia de publicidad de Australia nombró con él a aquella tendencia de ignorar a nuestros interlocutores presenciales por las distracciones del teléfono celular.
Esto no es una llamada de atención, pues, como decimos, varias personas hemos incurrido en esta falta a la gente que nos acompaña. Sin embargo, tampoco es una curiosidad; más bien hablamos de un problema real que está afectando las relaciones personales y la salud mental.
Así afecta
De acuerdo con el sitio especializado en temas de salud, Healthline, el phubbing disminuye la satisfacción entre parejas casadas y aumenta los índices de depresión en ellas. No es raro, entonces, que del mismo modo alimente las inseguridades conyugales.
Conforme a un estudio sobre el tema, el phubbing, aunado a lo anterior, es una amenaza para cuatro necesidades fundamentales:
- Pertenencia
- Autoestima
- Existencia significativa
- Control
Resulta que con este problema, sin darnos cuenta, sin pretenderlo, podemos estar afectando a la salud mental de la persona con la que estamos compartiendo tiempo, ya que, al ignorarla, es casi como restarle valor deliberadamente y atentar a las necesidades señaladas.
¿Cómo vencer al phubbing?
Lo más básico en este punto es hacer conciencia del problema y de cómo nos afecta y afectamos a otros con él.
El celular y las aplicaciones que llevamos están hechas para capturarnos y enajenarnos, por eso es tan difícil, a veces, desprenderse de él. Pero sí, se puede y es sano hacerlo.
Una vez más, haz conciencia de esto y mantén alejado el aparto cuando estés con tu pareja, amigos o familiares. Puede que de repente tengas que atender algo urgente, aunque bien sabemos que la mayoría de las veces que nos distraemos con el celular no es por un caso así.
En situaciones muy complicadas es recomendable buscar ayuda psicológica, a fin de redirigir tu energía hacia el aquí y el ahora.