La quinta edición del LuxuryLab Pop-Up Market convirtió al Beverly Wilshire en el epicentro mundial del lujo creativo. Tres días donde marcas latinas, experiencias gastronómicas exclusivas, arte, joyería y hospitalidad de alto nivel mostraron por qué el talento de la región está conquistando el mapa global del estilo.
Un fin de semana donde el lujo tomó una nueva forma
Hay fines de semana que redefinen una industria. Y luego está LuxuryLab Pop-Up Market 2025, una edición que fue más que un evento: un manifiesto sobre el futuro del lujo latino en el mundo. Durante tres días, el icónico Beverly Wilshire, A Four Seasons Hotel, frente a Rodeo Drive, territorio sagrado del glamour, se transformó en un epicentro de diseño, experiencias sensoriales y celebración cultural.
La plataforma, creada para impulsar a marcas emergentes hacia audiencias internacionales, consolidó en esta quinta edición su influencia dentro del universo del lujo contemporáneo. Desde socialités y compradores clave, hasta líderes creativos, prensa internacional, visionarios del diseño y figuras del entretenimiento: el Pop-Up reunió a quienes verdaderamente mueven la aguja en la industria.
Y lo hizo enfatizando algo que Esquire México conoce bien: el talento latino viene pisando fuerte, con propuestas que mezclan visión global, excelencia artesanal y narrativa cultural.
Un inicio con sello diplomático y un mensaje contundente
El viernes 21 de noviembre marcó el arranque oficial. El corte de listón, celebrado en la entrada principal del Beverly Wilshire, reunió a personalidades que reflejan la fuerza institucional detrás del proyecto: el Cónsul General de México en Los Ángeles, Carlos González Gutierrez, y Julie Wagner, CEO de Beverly Hills Conference & Visitors Bureau.
La alianza entre la plataforma y estas instituciones subraya una realidad: el talento latino ya no es emergente, es influyente, y merece un escaparate de alto perfil.
Durante la ceremonia inaugural, el City Council de Beverly Hills otorgó un reconocimiento especial a LuxuryLab Pop-Up Market, firmado por la alcaldesa Sharona R. Nazarian. Una distinción que no solo celebra el evento, sino el impacto cultural y económico de impulsar el diseño mexicano hacia audiencias globales.
Fue, en otras palabras, una validación formal de que esta plataforma es hoy un puente cultural de ida y vuelta entre México, Estados Unidos y el resto del mundo.
La declaración del fundador: un lujo que mira hacia adelante
En su mensaje, Abelardo Marcondes, CEO y fundador de LuxuryLab, dejó claro el espíritu del proyecto: abrir caminos, conectar industrias y llevar el talento latino a la conversación global del lujo.
“LuxuryLab Pop-Up Market nació con la misión de abrir puertas al talento y crear conexiones que impulsen el crecimiento de las marcas hacia mercados internacionales”, declaró. “Esta edición en Beverly Hills marca un nuevo capítulo para la creatividad de diseñadores emergentes en la industria del lujo”.
Es un discurso que refleja una tendencia global: el lujo del futuro será cultural, artesanal, emocional y, cada vez más, latino.
Crustacean Beverly Hills: el primer brindis de un fin de semana inolvidable
La apertura continuó con una cena exclusiva en Crustacean Beverly Hills, uno de los spots gastronómicos más influyentes del destino. Ahí, marcas, aliados y creadores se reunieron para brindar con Loco Tequila, que aportó un toque festivo y elegante a la velada.
Este inicio fue solo una muestra de lo que vendría: hospitalidad al más alto nivel, propuestas culinarias cuidadas y un ambiente donde el networking se dio de forma natural, auténtica y sofisticada.
Experiencias diseñadas para elevar el lujo
A lo largo del fin de semana, los invitados vivieron una serie de actividades pensadas para mostrar la riqueza del destino y la creatividad de las marcas participantes. Una agenda que se movió entre arte, gastronomía, moda y descubrimiento cultural.
Entre las experiencias más destacadas estuvieron:
- Coctelería artesanal con Loco Tequila, creada especialmente para los asistentes del Pop-Up.
- Atelier by Morena Corazón, una experiencia íntima que mostró la esencia de la marca.
- Un lounge exclusivo dentro del Beverly Wilshire con café, té y mimosas, acompañando la estancia de los invitados.
Pero el lujo no se quedó dentro del hotel. Beverly Hills también se convirtió en un escenario vivo para la agenda del evento:
- VIP Art Tour en el Museo Mr. Brainwash, un recorrido privado por el espacio del artista pop contemporáneo.
- VIP Jewelry Tour con Jason of Beverly Hills, donde los asistentes conocieron piezas únicas y procesos de creación.
- Un Rodeo Drive Walking Tour que incluyó una visita especial en la boutique Stefano Ricci.
- Experiencias culinarias en Dante Beverly Hills y The Cheese Store of Beverly Hills.
- Un almuerzo exclusivo en The Polo Lounge, dentro del legendario Beverly Hills Hotel.
- Un elegante Luxury Car Tour por la zona.
- Y una visita guiada a la Mansión Greystone, un ícono de Hollywood donde se han filmado videos musicales, películas y producciones históricas.
Un Pop-Up Market con visión curatorial
La esencia del LuxuryLab Pop-Up Market siempre ha sido su curaduría. Y en esta edición, bajo la dirección de Luisa Serna, el Beverly Wilshire se transformó en un espacio boutique donde cada marca contó una historia.
Entre las firmas participantes destacaron:
- Alma de Sur
- Daniela Califa
- José Sánchez
- Morena Corazón
- Le Superbe
- Sophie Simone
- Zac Be
- Aiyah
- Biblioteca Activist Wear
- Casa del Agua, entre otras
Andy Benavides: un impulso mediático global
La presencia de la creadora mexicana Andy Benavides como invitada especial llevó la conversación del evento a audiencias internacionales. Su estilo, su comunidad digital y su cercanía con el mundo del diseño aportaron visibilidad estratégica a las marcas participantes y al evento en general.
En un momento donde el lujo se define también desde la influencia y la conversación social, su participación fue un acierto que reforzó el impacto mediático de la edición.
El lujo del futuro habla en español
LuxuryLab Pop-Up Market 2025 no solo celebró el diseño y la creatividad; confirmó que el lujo contemporáneo está cambiando. Hoy, el nuevo lujo es cultural, narrativo, artesanal y profundamente humano. Y por eso, el talento latino —con sus técnicas, su identidad, su visión de mundo— está ocupando un lugar central.
En un destino donde el lujo se vive minuto a minuto, esta edición logró algo distinto: crear un diálogo entre culturas, marcas e historias que trascienden lo estético.
Beverly Hills fue el escenario, pero la esencia fue latina.
Y eso lo cambió todo.