La relojería, ese arte minucioso que fusiona precisión, ingeniería y belleza, ha encontrado en México un nuevo epicentro. No se trata solo de un mercado que consume piezas con pasión y conocimiento, sino de un país que, en palabras de Carlos Alonso, director general del Salón Internacional Alta Relojería (SIAR), se ha convertido en un “laboratorio estratégico” para la industria global. En otras palabras: México ya no solo observa el tiempo, lo anticipa.
Del 14 al 16 de octubre, The St. Regis Mexico City será sede del SIAR 2025, una edición histórica en más de un sentido. Con la participación de 51 firmas —desde casas centenarias hasta micromarcas audaces— el evento no solo mostrará el músculo creativo y técnico de la relojería contemporánea, sino que consagrará al país como un punto clave en el mapa horológico mundial. Y esta vez, el mundo estará mirando.
El tema de este año, “México LAB”, no es un recurso de marketing: es una declaración de principios. En un contexto internacional en el que las tensiones comerciales y los aranceles sacuden los flujos tradicionales de la relojería —como la imposición de tarifas por parte de EE. UU. a Suiza—, México emerge como un espacio neutral, dinámico y sofisticado. Las cifras respaldan la narrativa: los años 2023 y 2024 marcaron un crecimiento notable en ventas, impulsadas principalmente por consumidores locales exigentes y cada vez más informados.
Por eso, Deloitte eligió este año al SIAR como el escenario para presentar, por primera vez en México, su reputado informe anual sobre la industria relojera global, que ahora incluye un capítulo exclusivo dedicado al mercado mexicano. Una señal inequívoca de que el país ha dejado de ser un actor secundario para convertirse en protagonista.
El SIAR no es solo una exposición: es un termómetro de tendencias, un foro de ideas y un escaparate de lanzamientos mundiales. Y este año será, más que nunca, un espacio de descubrimiento. El panel del 15 de octubre, titulado “¿Es México el laboratorio relojero de los próximos años?”, reunirá voces clave para debatir el papel del país en la transformación de una industria que, aunque ligada a la tradición, vive una revolución silenciosa.
En ese sentido, el SIAR 2025 brilla por su diversidad: de los gigantes históricos como Breitling, IWC o Piaget a los provocadores del mundo indie como H. Moser & Cie., De Bethune o Louis Moinet. Se suman también micromarcas vibrantes como Norqain, Louis Erard o Maurice Lacroix, que encuentran en el mercado mexicano un público joven, culto y ávido de propuestas diferentes.
Este año, el SIAR será testigo de debuts tan esperados como el del maestro suizo Antoine Preziuso, el innovador chino Ciga Design, o la mítica casa suiza de herramientas Bergeon, que por primera vez mostrará su costado más lifestyle. Se suma también Massena LAB, referencia del nuevo coleccionismo por su enfoque experimental y colaborativo.
En paralelo, regresan firmas emblemáticas como TAG Heuer, en plena revalorización de su legado en la F1, y L. Leroy, con más de 260 años de historia y una colección de alta complicación que combina técnica y narrativa. Sin olvidar a nombres venerados como Konstantin Chaykin o Ludovic Ballouard, y leyendas pop como G-Shock, que sigue cautivando a las nuevas generaciones.
Además, Phillips in Association with Bacs & Russo, la casa de subastas más influyente del mundo, participará por primera vez con una muestra de piezas excepcionales, actividades culturales y valoraciones exclusivas para los coleccionistas locales.
“La relojería actual se mueve con tres motores: las casas de prestigio, las firmas independientes y las micromarcas emergentes”, sentencia Carlos Alonso. Y el SIAR 2025 es uno de los pocos lugares del mundo donde esos tres mundos conviven, dialogan y se nutren mutuamente.
Más allá del lujo, el evento se ha convertido en una plataforma cultural y comercial que refleja la complejidad del mercado mexicano. Un espacio donde el coleccionismo se cruza con el diseño, la tradición con la innovación, y el lujo con la comunidad.
En esta edición, nombres consagrados como Bvlgari, Panerai, Zenith, Hublot, Grand Seiko o Tudor compartirán espacio con propuestas independientes como Arnold & Son, Cvstos o Speake-Marin, y con micromarcas que traen nuevas narrativas, formas y
En un mundo que se reinventa a velocidad constante, el SIAR 2025 no solo marca el pulso del tiempo, lo redefine. México ya no es solo un destino atractivo: es un referente creativo, comercial y cultural dentro de una industria que valora tanto la precisión como la pasión.
Y mientras el mundo observa los relojes, la relojería observa a México.