Durante décadas, los villanos de Toy Story han sido más que simples obstáculos: han sido espejos incómodos. Sid, el niño destructor; Lotso, el oso amargado por el abandono; Stinky Pete, el coleccionista resignado. Ahora, Pixar vuelve a levantar ese espejo, pero esta vez lo dirige a un rincón muy presente en la vida familiar: la pantalla de una tablet.
Tecnología contra nostalgia
Pixar confirmó oficialmente que Toy Story 5 está en marcha y ya compartió su primer gran giro argumental: el antagonista será una tablet educativa llamada LilyPad. Inspirada en los dispositivos LeapFrog que invadieron las mesas navideñas hace más de una década, este nuevo personaje será el eje de una trama que enfrenta lo tradicional con lo digital.
El lema que acompaña al adelanto es tan claro como inquietante: “Toys meet Tech”. Es decir, los juguetes de toda la vida —con sus aventuras, vínculos, cicatrices y memorias— se verán cara a cara con una nueva generación de entretenimiento diseñado para enseñar, pero también para atrapar.
Pete Docter, director creativo de Pixar, mostró los primeros dos minutos de la película y dio a conocer este nuevo dilema. Aunque aún no se ha revelado el nombre final ni la voz que tendrá LilyPad, se sabe que su presencia sacudirá el universo emocional de los juguetes. Especialmente de Woody, Buzz y los suyos, quienes ya no luchan por no ser olvidados… sino por no ser reemplazados.
¿Qué es lo mejor para Bonnie?
Ese será, al parecer, el gran conflicto emocional de la cinta. Bonnie —la niña que recibió a los protagonistas al final de Toy Story 3— ya no es una pequeña rodeada de muñecos, dinosaurios y vaqueros. Ahora hay pantallas. Hay aplicaciones. Hay algoritmos que “saben” qué necesita. Y LilyPad, como antagonista, no será malvada al estilo clásico. Más bien, representará una nueva forma de cuidado, una voz programada para enseñar, organizar y acompañar.
Esa sutileza es lo que vuelve interesante a Toy Story 5. En lugar de forzar una amenaza caricaturesca, Pixar propone un dilema moral: ¿Qué significa ser el juguete favorito cuando el juego ya no es lo que era?
Pixar se reinventa... otra vez
Con más de 3.200 millones de dólares recaudados a lo largo de sus cuatro entregas, la saga de Toy Story es el corazón palpitante de Pixar. También ha sido su campo de pruebas narrativo más audaz. A lo largo del tiempo, cada película evolucionó con su audiencia, abordando temas como el abandono, la identidad, la pérdida y el propósito.
Ahora, con la introducción de un antagonista que no tiene forma de niño cruel ni de osito con aroma a fresa, Pixar apuesta por una historia más introspectiva. Una que no solo hablará a los niños, sino también a los adultos que hoy se preguntan si el brillo de una pantalla vale más que el silencio compartido con un juguete viejo.
La pregunta, entonces, no es si Toy Story 5 emocionará. Es otra, mucho más incómoda: ¿puede una tablet competir con el poder de la imaginación? Y peor aún, ¿ya lo está haciendo