Los diamantes cultivados en laboratorio, también conocidos como diamantes Lab-Grown, se fabrican en condiciones controladas que imitan el proceso natural de formación de diamantes, utilizando altas presiones y altas temperaturas. A pesar de ser creados en laboratorios, estos diamantes poseen la misma química, óptica y física que los diamantes extraídos de la tierra, lo que los hace idénticos en calidad y belleza.
Los diamantes cultivados en laboratorio, una opción para todos
Los diamantes cultivados en laboratorio presentan una serie de beneficios que los hacen destacar frente a los diamantes extraídos de forma natural. En primer lugar, su alta calidad y mayor pureza los convierten en una opción atractiva para aquellos que buscan una piedra preciosa sin imperfecciones. Al no tener suciedad ni impurezas arraigadas en ellos, los diamantes cultivados en laboratorio tienen menos defectos y suelen recibir calificaciones de pureza más altas que sus contrapartes naturales. Además, la tecnología utilizada permite obtener diamantes en varios colores, siendo más brillantes, perfectos, puros y con un color estable. Por último, pero no menos importante, los diamantes cultivados en laboratorio son ecológicos y sostenibles, causando poco o ningún daño ambiental y ofreciendo una excelente opción para todos los involucrados en la cadena de suministro, incluidos el comprador, el fabricante, el proveedor y la tierra en general.
“Diamonds for everyone” de Pandora
Pandora, la reconocida marca de joyería, ha adoptado esta tecnología para crear una exclusiva colección de diamantes cultivados en laboratorio. Bajo el lema “Diamonds for everyone”, Pandora se ha comprometido a reducir su huella de carbono al utilizar diamantes cultivados en laboratorio cortados y pulidos con energía 100% renovable, y engastados en joyas hechas con plata u oro 100% reciclado.
La colección de Pandora ha sido lanzada en México, donde ha sido recibida con entusiasmo por los amantes de la joyería consciente. Esta iniciativa no solo ofrece una alternativa ética y sostenible a los diamantes naturales, sino que también destaca el compromiso de Pandora con la innovación y la responsabilidad ambiental.
Los diamantes cultivados en laboratorio representan una nueva era en la joyería, donde la belleza y la sustentabilidad van de la mano.
Las 4 “C” de los dimantes cultivados en laboratorio de Pandora
Los diamantes de laboratorio se distinguen por cumplir con los más altos estándares de belleza y calidad, conocidos como las 4C: Cut (Corte), Clarity (Claridad), Colour (Color) y Carat (Quilates).
El Cut (Corte) de los diamantes es excepcional, ya que define su personalidad y brillo. Cada piedra es cortada magistralmente, perfeccionando ángulos precisos, proporciones y simetría para lograr un brillo y destello máximos.
En cuanto a la Clarity (Claridad), los diamantes son evaluados minuciosamente para garantizar su impecabilidad, valor general y belleza. Todos los diamantes son de claridad VS+, lo que significa que no tienen imperfecciones visibles a simple vista, asegurando la máxima pureza.
En cuanto al Colour (Color), los diamantes se clasifican de D a Z, con solo los de grado G-J (casi incoloro) obteniendo la calificación de brillo mejor en su clase. Esto garantiza que los diamantes tengan un color excepcionalmente puro y brillante.
Finalmente, el Carat (Quilates) se refiere al peso de un diamante, no a su tamaño. Los diamantes de laboratorio vienen en pesos de varios quilates, y sin importar el peso que elija, la calidad de las otras 3C siempre está garantizada. Así, puede estar seguro de que está adquiriendo un diamante de la más alta calidad y belleza.