Hay algo glorioso —y un poco insano— en ver a Tom Cruise desafiar a la muerte una y otra vez, solo por el placer de vernos al borde del asiento con las palmas sudadas y el corazón en la garganta. Misión: Imposible es una franquicia de acción, pero también una institución de cine espectáculo, de riesgo real, de acrobacias sin red. Cada entrega es un boleto directo a la tensión pura, con al menos un momento que te hace pensar: “Este tipo está loco... y lo amo por eso”.
Aquí va un recorrido (con pulso acelerado) por los momentos más cardíacos de cada película. Prepárate, porque vas a querer volver a verlas todas.
Misión: Imposible (1996, Brian De Palma)
Momento estrella: El descenso silencioso en Langley.
Puede que no haya fuego ni explosiones, pero pocas escenas han sido tan imitadas como esta joya del suspenso. Ethan Hunt suspendido por cables, sudando en completo silencio, con una gota de sudor como el verdadero villano. Pura tensión. Pura clase. Pura De Palma.
Misión: Imposible II (2000, John Woo)
Momento estrella: Escalada libre en Moab.
Ethan está de vacaciones... colgado de una roca sin arnés. Así arranca esta entrega estilizada a lo Woo, con palomas blancas, cámaras lentas y Cruise colgado a cientos de metros del suelo. Nada como empezar con una dosis de adrenalina vertical.
Misión: Imposible III (2006, J.J. Abrams)
Momento estrella: Ethan corre por media China.
Porque no hay Misión: Imposible sin una buena secuencia de Cruise corriendo como si el destino del planeta dependiera de ello (spoiler: probablemente sí). En esta entrega, la acción es personal y frenética, y J.J. le mete turbo a la saga.
Misión: Imposible – Ghost Protocol (2011, Brad Bird)
Momento estrella: Escalando el Burj Khalifa.
Un guante roto. Un edificio de 828 metros. Un tipo colgado del lado equivocado del vidrio. Esta escena redefinió el concepto de vértigo en el cine y confirmó que Cruise no tiene miedo a nada... excepto tal vez a no superarse con cada película.
Misión: Imposible – Rogue Nation (2015, Christopher McQuarrie)
Momento estrella: El despegue del A400M.
Sí, ese avión que ves en la escena inicial realmente está despegando, y sí, Cruise realmente está colgado del costado. Sin pantalla verde. Sin truco barato. Solo un hombre y su pacto con la gravedad.
Misión: Imposible – Fallout (2018, Christopher McQuarrie)
Momento estrella: La pelea en el baño.
Un baño de hotel se convierte en ring de MMA. Ethan y Walker (Henry Cavill, recargando los brazos como si fueran escopetas) se enfrentan a un enemigo que se niega a caer. Brutal. Físico. Imposible de olvidar.
Misión: Imposible – Dead Reckoning Parte 1 (2023, McQuarrie)
Momento estrella: Persecución romana en un Fiat 500.
¿Qué pasa cuando metes a dos espías esposados en un microauto italiano y los sueltas en las calles de Roma? Una persecución hilarante, caótica y con mucha chapa volando. El equilibrio perfecto entre acción y comedia de alto octanaje.
¿Y lo que viene...?
Con Dead Reckoning – Parte 2, se viene otra ronda de locuras imposibles, y si la historia nos ha enseñado algo es que Tom Cruise siempre encuentra una forma de subir la apuesta. Así que agárrate bien, porque la siguiente misión promete ser la más salvaje de todas.
¿Tienes una favorita? ¿O simplemente estás aquí para ver a Tom desafiar la física con una sonrisa de medio lado? Cuéntanos en los comentarios cuál escena te hizo gritarle a la pantalla (y agradecer que alguien más se arriesgue para que tú solo tengas que ver).
