Entre diciembre y enero, Nueva York baja la temperatura, pero sube las luces y multiplica las posibilidades. La ciudad es fría en el termómetro, pero cálida en espíritu: cada uno de sus cinco distritos (Manhattan, Brooklyn, Queens, The Bronx y Staten Island) ofrece una chispa distinta, una manera propia de despedir el año con estilo.
Aquí algunas experiencias imperdibles para cerrar el año en la Gran Manzana, además de otras para inaugurar el 2026, envuelto en esa mezcla inconfundible de energía, arte, cultura y teatro de Broadway que solo esta ciudad puede presumir.
1. Un árbol icónico que ilumina Nueva York
El corazón visual de la temporada late en Rockefeller Center, donde un abeto monumental se enciende con más de 50,000 luces LED y una estrella de Swarovski que parece suspendida.
Hasta mediados de enero podrás verlo brillar, patinar en la pista que lo rodea o simplemente disfrutar de un chocolate caliente. Como cierre simbólico, el árbol se convertirá en madera para Habitat for Humanity.
A unos pasos, no te pierdas las vitrinas decoradas y el shopping en Fifth Avenue.
2. Miniaturas que celebran a la ciudad
En el Bronx, el New York Botanical Garden lleva más de treinta años celebrando el Holiday Train Show, donde trenes en miniatura recorren casi 200 réplicas de monumentos neoyorquinos, todas hechas con materiales naturales. Por la noche, el jardín se vuelve un bosque iluminado durante las Holiday Train Nights: música, luz y la sensación de estar dentro de un cuento navideño. Hasta el 11 de enero.
Además, este jardín vive un momento histórico, pues se prepara para una transformación tras seleccionar a WEISS/MANFREDI como firma responsable de rediseñar su Museum Complex y la Mosholu Entrance & Welcome Center. Este proyecto (una reinvención arquitectónica que conectará mejor a los visitantes con el vasto mundo de las plantas, la ciencia y la historia botánica del recinto) promete modernizar espacios y revitalizar la experiencia para más de un millón de personas que visitan cada año.
3. El invierno baila en Nueva York
Nada anuncia el invierno como El Cascanueces del New York City Ballet, con coreografía de George Balanchine. En el Lincoln Center, Tchaikovsky conduce esta fantasía de copos de nieve, trajes brillantes y un árbol que crece frente a los ojos del público. Navidad tiene muchas tradiciones, pero pocas tan entrañables como esta.
A la par, el Christmas Spectacular del Radio City Music Hall llega a su edición centenaria con nuevas coreografías, efectos visuales y un cierre que cautiva. Nueva York presume muchos shows, pero este es de los más queridos por locales y visitantes.
También Cirque du Soleil celebra la temporada con ’Twas the Night Before…, su primera producción navideña en Nueva York. Acrobacias, danza aérea e inspiración en el poema clásico “A Visit from Saint Nicholas”; estará del 4 al 28 de diciembre en el teatro del Madison Square Garden.
4. De dioses egipcios a pasiones medievales
Para quienes celebran el fin de año entre museos, el Metropolitan Museum of Art ofrece Divine Egypt, una muestra que reúne más de 250 piezas –incluidos préstamos del Louvre y Boston– para explorar cómo los egipcios concebían lo divino; y Spectrum of Desire, un recorrido sensorial por la identidad y el deseo en la Europa medieval.
5. Monet conquista Nueva York
El Brooklyn Museum presenta Monet and Venice, la exposición más grande dedicada al artista en más de 25 años. Más de 100 obras exploran su manera de capturar la luz y la atmósfera de la ciudad italiana, alejándose de las postales turísticas para entrar en un estado casi meditativo.
El museo abre por la noche varios días de la temporada para poder recorrer estas salas. Una experiencia perfecta para cerrar el año con belleza impresionista.
6. Broadway: teatro para todo el año
Broadway cierra el año con una energía que confirma por qué este es uno de los escenarios más dinámicos del mundo. Entre las nuevas propuestas destacan Liberation, un homenaje a la amistad y al legado de mujeres revolucionarias; Oedipus, que renueva la tragedia clásica con una historia política moderna; y Bug, un thriller psicológico donde Carrie Coon (The Gilded Age y The White Lotus) mantiene al público al borde del asiento.
A este impulso de estrenos se suma The Queen of Versailles, una sátira protagonizada por Kristin Chenoweth, en la que da vida a Jackie Siegel, exingeniera convertida en Mrs. Florida y luego en billonaria. Junto a su esposo, emprende su proyecto más desmesurado: construir en Orlando la mansión privada más grande del país, un palacio de 100 millones de dólares inspirado en Versalles. La producción termina temporada el 21 de diciembre, así que hay que verla antes de que baje el telón.
La cartelera también brilla con grandes regresos. En el Imperial Theatre, Chess resurge con la música icónica de los creadores de ABBA y un elenco que incluye a Aaron Tveit, Lea Michele y Nicholas Christopher; uno de los eventos escénicos más electrizantes de la temporada. Y en el Vivian Beaumont, Ragtime vuelve con una producción épica encabezada por Joshua Henry, Caissie Levy y Brandon Uranowitz. Esta adaptación musical de la novela de E.L. Doctorow sigue a tres familias: una pareja afroamericana, un inmigrante judío con su hija y una familia blanca adinerada en su búsqueda del sueño americano a inicios del siglo XX.
Para quienes planean un viaje posterior, enero ofrece un incentivo irresistible: NYC Broadway Week, que del 20 de enero al 12 de febrero pondrá a la venta boletos 2x1 para muchas de las producciones más importantes de la cartelera. A partir del 7 de enero se revelará la lista completa de shows participantes, así que podrás descubrir nuevos títulos o repetir esos musicales que quieras cantar una y otra vez.
7. Aprovecha los hoteles con descuento
El invierno vuelve a Nueva York sorprendentemente accesible, pues durante NYC Hotel Week, muchos alojamientos ofrecen 25% de descuento en estancias del 2 de enero al 12 de febrero de 2026.
Entre las opciones más tentadoras destaca el Moxy NYC Times Square, un hotel que combina diseño inteligente, energía joven y una ubicación privilegiada en pleno Midtown. Desde aquí, Broadway, Bryant Park, Madison Square Garden, Rockefeller Center y Central Park quedan a unos pasos; mientras que varias líneas de metro permiten moverte con facilidad. Aquí, los cuartos aprovechan cada centímetro con ingenio: mobiliario flexible, regaderas amplias y televisiones con acceso a plataformas de streaming. Los espacios comunes fomentan el encuentro entre viajeros y locales, desde Bar Moxy y su pop-up de Café d’Avignon hasta Magic Hour, el rooftop bar más grande de la ciudad, con vistas al Empire State, DJs, un épico brunch de fin de semana y montajes estacionales que hacen imposible no querer presumirlo en Instagram.
8. La cuenta regresiva más famosa del planeta
El 31 de diciembre, el mundo entero mira hacia Times Square. La bola luminosa desciende, miles gritan a la vez y, por unos segundos, la ciudad se detiene. Es un ritual eléctrico, y quien lo vive, lo recuerda para siempre.
La celebración incluye la Wishing Wall (donde cualquiera puede escribir un deseo que caerá convertido en confeti a medianoche) además de la transmisión en vivo, la música, los preparativos minuto a minuto y esa anticipación casi palpable que empieza desde la tarde.
Y cuando el reloj marca las doce y la ciudad, el país y el mundo entero celebran al unísono ese segundo exacto en el que un año termina y otro comienza, Nueva York vuelve a demostrar que las posibilidades, como los deseos lanzados al aire, parecen infinitas…
Fotos: Cortesía New York City Tourism + Conventions