Shaquille O’Neal no necesita presentación. Leyenda viviente de la NBA, ídolo eterno de los Lakers, carismático como pocos y, por supuesto, colosal. Pero esta vez, Shaq se robó las cámaras con su nuevo coche. Se trata de una brutalidad sobre ruedas que parece salida de un apocalipsis motorizado al más puro estilo de la saga Mad Max.
Su nueva joya es un RAM 1500 TRX blindado, personalizado a medida por Apocalypse Manufacturing, una empresa especializada en transformar camionetas en auténticos tanques urbanos. Y cuando decimos a medida, lo decimos en serio: este vehículo está pensado para un hombre de 2.16 metros de altura, más de 150 kilos de puro músculo y carisma, y una debilidad nada secreta por los vehículos que hacen girar cabezas.
Apocalypse sobre cuatro ruedas
¿Quieres cifras? Agárrate: motor V8, más de 700 caballos de fuerza, blindaje completo, neumáticos todoterreno descomunales y unas puertas verticales que parecen sacadas de un videojuego postapocalíptico. No es un coche, es una máquina de guerra.
En el interior, todo es lujo. Pantallas, acabados premium, asientos XL diseñados para un gigante, y espacio, mucho espacio. Porque si algo sabe Shaq es que la comodidad también se construye a la medida. Además, todo está reforzado: este TRX no es solo intimidante por fuera, también es prácticamente impenetrable.
Shaq: un coleccionista implacable de excesos
Quien crea que este monstruo de acero es un capricho aislado, no conoce al verdadero Shaquille O’Neal. El exjugador es un coleccionista empedernido de autos únicos, y su garaje es un verdadero parque temático para amantes del motor.
En su colección conviven un Cadillac Escalade con puertas tipo “alas de gaviota”, un Lamborghini Gallardo adaptado para su tamaño, un Hummer H2 con pantallas de TV integradas y un Dodge Challenger Hellcat rediseñado por dentro. Y eso es solo el principio.
También presume de un Polaris Slingshot con pintura camaleónica, una Ford F-650 descomunal y hasta un camión de bomberos transformado en coche recreativo. ¿Rolls-Royce? Tiene varios. ¿Ferraris? También. ¿Vehículos imposibles que nadie más podría conducir? Bienvenido al estilo Shaq.
Lo de Shaquille con los coches es coleccionismo, pero también personalidad en estado puro. Cada uno de sus vehículos habla de su forma de ver la vida: grande, sin complejos, con estilo y con potencia. Su nuevo RAM 1500 TRX no es la excepción. Es, en muchos sentidos, el reflejo perfecto de su leyenda: una mole imparable, intimidante, pero con clase.