Sin duda la reina Isabel II fue una monarca sin precedentes: con 70 años de reinado, parecía que nada la detendría en su camino por enaltecer a su patria. Hasta algunos días antes de su muerte esgrimió una vitalidad sin igual, por lo que no es de sorprender que propios y extraños tratáramos de desifrar de dónde la sacaba. Pues bien, la respuesta es más simple de lo que se puede pensar: cócteles diarios. ¡A su salud, your highness! https://www.esquirelat.com/politica/asi-despide-la-politica-a-la-reina-isabel-ii/ Exacto, el secreto de la larga vida de la reina Isabel II fue el alcohol, aunque todo con “moderación”, por supuesto. A pesar de siempre tener una ocupada agenda, la royal siempre se dio tiempo para un cóctel. De hecho, hizo tiempo para consumir cuatro al día exactamente. De acuerdo con un medio británico, la Reina bebía cuatro bebidas alcohólicas al día. Después de un análisis de sus rutinas alimenticias, descubrieron que antes del mediodía tomaba ginebra, por la tarde una copa de vino (blanco o tinto dependiendo de su antojo), después un Dry Martini (que era su favorito) y para finalizar el día, antes de dormir, tomaba una copa de Champagne Bollinger, King o Lanson. Quién fuera ella... Margaret Rhodes, prima de la reina Isabel, asegura que las preferencias en cuanto a bebidas nunca han cambiado, así que parece que la constancia, también es otra clave para hacer de esta rutina efectiva. A esto le llamamos beber realmente. Con información de Harper’s Bazaar en Español.
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