Nuestro viaje al universo de Cameron comienza en Lightstorm Entertainment, en Manhattan Beach, la productora independiente fundada en 1990 por el director, tecnólogo y explorador canadiense James Cameron. En su interior, se asemeja más a un museo que a un estudio de cine tradicional. Para llegar a la oficina de Cameron, primero se atraviesa un hangar repleto de una extensa colección de utilería cinematográfica. Allí, estatuas de tamaño natural de Jake y Neytiri, los protagonistas azules de la saga Avatar, se yerguen junto al esqueleto de acero del Terminator, una réplica de la infame Reina de Alien y dos maquetas del Titanic: una que representa tanto la enorme estructura utilizada para las tomas submarinas como los restos del naufragio que aparecen en el documental.
Esta impresionante exhibición prepara el escenario perfecto para un encuentro con el visionario cineasta responsable de obras legendarias como Terminator y Alien. Cameron se ha ganado el título de “rey de la taquilla”, con sus películas —incluidas Titanic y las dos de Avatar (hasta la fecha)— recaudando 7.500 millones de dólares en todo el mundo. Narrador incansable, su pasión por el océano comenzó con El Abismo, gran parte de la cual se filmó bajo el agua en un tanque de 7,5 millones de galones en una instalación nuclear en desuso; continuó con Titanic, ganadora de 11 premios Óscar; y ahora culmina con la esperadísima tercera entrega de su saga Avatar: Fuego y Ceniza, que llegó a los cines en diciembre pasado.
Photographer: JOHAN SANDBERG Style: NIK PIRAS Interview: ROBERTO CROCI Grooming: NADEGE SCHOENFELD Style assistant: VALERIE TRONOLONE Light assistant: ROBERT KOZEK 2nd light assistant: PATRICK FREYNE Digital: CHRIS NICHOLS Production: SABRINA BEARZOTTI Social Media credits: Talent: JAMES CAMERON @jamescameronofficial Style: NIK PIRAS @nikpiras Photographer: JOHAN SANDBERG @studiojohansandberg Interview: ROBERTO CROCI @labestiala
«¿Un espresso?», pregunta Cameron en un italiano sorprendentemente fluido mientras nos da la bienvenida a una sala de conferencias adornada con sus bocetos y pósteres de juventud. Luego se sienta, listo para hablar sobre su última película, la naturaleza, la tecnología, Hollywood y el futuro.
ESQ: El mensaje de la primera película de Avatar era bastante claro: abordaba temas como la protección del medio ambiente, la avaricia corporativa y la vulnerabilidad de los pueblos indígenas.
JC: Sin embargo, la segunda película, Avatar: El Camino del Agua, cambia su enfoque a la devastación de las selvas tropicales y los océanos, abordando problemas como la contaminación, la sobrepesca y la caza de ballenas. Me apasiona tanto la protección de estos entornos que incluso creé una serie para National Geographic. En Avatar: Fuego y Ceniza, el énfasis en los problemas ambientales pasó a un segundo plano, ya que tenía un tema específico en mente para ese proyecto.
Photographer: JOHAN SANDBERG Style: NIK PIRAS Interview: ROBERTO CROCI Grooming: NADEGE SCHOENFELD Style assistant: VALERIE TRONOLONE Light assistant: ROBERT KOZEK 2nd light assistant: PATRICK FREYNE Digital: CHRIS NICHOLS Production: SABRINA BEARZOTTI Social Media credits: Talent: JAMES CAMERON @jamescameronofficial Style: NIK PIRAS @nikpiras Photographer: JOHAN SANDBERG @studiojohansandberg Interview: ROBERTO CROCI @labestiala
ESQ ¿Cuál era ese tema?
JC: El tema de la pérdida. Me sentí obligado a explorar su significado y sus consecuencias. Creo que las grandes películas comerciales, como las superproducciones de superhéroes, a menudo no dan en el clavo al abordar este tema. Perder a un ser querido, como Neytiri y Jake Sully al final de Avatar 2, cambia tu vida para siempre. Las reacciones vengativas que se ven a menudo en esas películas resultan poco realistas; así no es como la gente realmente procesa el duelo. El dolor puede ser paralizante, y eso es lo que le sucede a Neytiri al comienzo de Fuego y Ceniza. Mi objetivo era representar la experiencia humana de forma auténtica: tras estos grandes alienígenas azules se esconde una profunda historia sobre la familia y la pérdida. Es una película hecha por humanos, para humanos.
ESQ:¿Qué simbolizan el fuego y las cenizas del título?
JC: Se refieren directamente a un clan hostil que aparece en la nueva entrega, pero el fuego también simboliza la destrucción y el odio; es una fuerza caótica y devastadora. Nos recuerda lo que vivimos en Los Ángeles, donde las llamas devoraron casas y barrios. Las cenizas simbolizan el duelo. Es el dolor que alimenta el fuego del odio en un ciclo sin fin. Pensemos en la situación israelí-palestina o en la agresión rusa en Ucrania: estos conflictos se prolongan indefinidamente, con cada bando culpando al otro. ¿Cómo podemos romper este ciclo? Estos temas son recurrentes en la película. Avatar 2 y Avatar 3 fluyen como dos partes de una misma narrativa, mientras que los episodios 4 y 5 explorarán una historia diferente, si tengo la oportunidad de realizarlos. Realmente espero que sí y estoy deseando hacerlo.
ESQ: Tras el éxito de Barbie y Oppenheimer, todos están ansiosos por ver si tu película puede salvar la taquilla este año.
JC: Desde esta perspectiva, veo a Avatar como una película que destaca en el mercado; siempre lo ha sido. ¿Puede salvar a la industria? No, por supuesto que no. Sin embargo, podemos aspirar a obtener algunas ganancias y demostrar lo que el cine aún puede lograr. No puedo predecir el futuro, pero sí sé que tenemos una buena película.
ESQ: ¿Cómo le va a Hollywood últimamente?
JC: Está pasando por un mal momento. Durante la pandemia, vimos el auge de las plataformas de streaming, con grandes empresas tecnológicas invirtiendo grandes sumas de dinero en los cineastas, atrayéndolos con ofertas irresistibles, presupuestos más altos y la promesa dela misma alta calidad que las películas en los cines, pero sin las restricciones, los límites de duración ni la censura. Así que todos se subieron al tren. Pero entonces, de repente, los presupuestos se redujeron a la mitad o incluso a un tercio de lo que eran cinco años antes. La disminución de la financiación empeoró aún más debido a las huelgas.
ESQ: ¿Cómo es eso posible?
JC: El momento de las huelgas no pudo haber sido peor. Si bien trajeron algunos beneficios para guionistas y actores, muchos miembros de los equipos técnicos perdieron sus empleos. Al mismo tiempo, las películas que dependen en gran medida de impresionantes efectos visuales ya no se aprueban; son demasiado costosas, y el verdadero gasto no proviene de la tecnología, sino de las personas: los artistas que crean esos efectos visuales.
ESQ: Algunos están utilizando IA generativa para reducir costos.
JC: Por supuesto. Sin embargo, no me interesa, o al menos no en crear la imagen final con IA. Planeo integrarla eventualmente, ya que no quiero parecer un ludita, pero prefiero basarme en mi propio razonamiento para resolver problemas. Ahora mismo, estoy intentando averiguar si puedo usar IA generativa en efectos visuales y cómo hacerlo. Es interesante observar que las imágenes de Avatar no se basaron en esta tecnología en absoluto. Durante las últimas dos décadas, hemos estado utilizando el aprendizaje automático, un precursor de la IA generativa, para gestionar escenas con multitudes y generar algoritmos que ayudan a crear modelos de personajes basadosen la apariencia física de los actores.
ESQ: ¿Sin reemplazar a los actores?
JC: Para nada. Celebramos y honramos a los actores. Nunca los forzamos ni intentamos imponerles emociones falsas. Si quiero que la escena sea más emotiva, simplemente se lo pido al actor, porque confío en el proceso. Nos llevó mucho tiempo lograr esas interpretaciones auténticas. Pero no confundamos la IA actual con la IAG (Inteligencia Artificial General) de Terminator 2; eso sería realmente peligroso. Por suerte, aún no hemos llegado a ese punto.
Photographer: JOHAN SANDBERG Style: NIK PIRAS Interview: ROBERTO CROCI Grooming: NADEGE SCHOENFELD Style assistant: VALERIE TRONOLONE Light assistant: ROBERT KOZEK 2nd light assistant: PATRICK FREYNE Digital: CHRIS NICHOLS Production: SABRINA BEARZOTTI Social Media credits: Talent: JAMES CAMERON @jamescameronofficial Style: NIK PIRAS @nikpiras Photographer: JOHAN SANDBERG @studiojohansandberg Interview: ROBERTO CROCI @labestiala
ESQ: ¿Le preocupa?
JC: No puedo negarlo. Todas mis películas, en última instancia, dicen lo mismo: estamos perdidos. Pero también dicen que somos inteligentes y fuertes, y que el amor es lo que nos mantiene unidos, como el vínculo entre madres e hijas en Alien y Terminator. He sido un gran aficionado a la ciencia ficción desde niño porque mira hacia el futuro. A veces intenta predecirlo y fracasa estrepitosamente. Otras veces, acierta. Pero su función principal es reflejar quiénes somos hoy y hacernos reflexionar: ¿Hacia dónde vamos? ¿Qué pasará si las cosas empeoran? ¿Y si todo sigue igual? Siempre se trata de futuros sombríos. Nadie escribe libros donde lo maravilloso parezca maravilloso. Se necesita conflicto para alimentar el drama.
ESQ: ¿Tu éxito en la industria cinematográfica te ha dado más libertad creativa?
JC: Gracias a Titanic, la película más taquillera de todos los tiempos y la que más entradas vendió, decidí seguir un camino alternativo que antes había descartado: la ciencia, la exploración y la tecnología. Así que, durante años, le di la espalda a Hollywood y me dediqué a explorar las profundidades del océano. Lo hice durante siete años, de 1998 a 2005. Luego, en 2005, comencé mi aventura con Avatar, que absorbió mi vida por un tiempo.
ESQ: ¿Echas de menos el buceo?
JC: Me encantaba el buceo libre (apnea); solía bucear hasta 40 metros, pero ya no puedo alcanzar esas profundidades. Todavía disfruto del buceo con escafandra autónoma porque me permite llegar a cualquier profundidad de forma segura, ya que está equilibrado y compensa la presión. Y luego están los submarinos, que son una experiencia totalmente diferente. Al adentrarte en una de estas profundidades, pones tu vida en manos de la tecnología, pero también necesitas tener conocimientos de ingeniería y física. Cuando descendí a la Fosa de las Marianas, el punto más profundo de la Tierra, me convertí en la tercera persona en alcanzar esa profundidad. Los primeros lo hicieron en 1960, incluyendo a mi querido amigo Don Walsh.
ESQ: Hay que estar bien equipado para llegar a esas profundidades.
JC: De pies a cabeza —o mejor dicho, hasta las muñecas (ríe)—, ya que llevo conmigo mi fiel Rolex. Tengo una excelente relación con ellos desde hace 13 años, desde que patrocinaron mi expedición de 2012. Diseñaron un reloj especial desde cero, y me acompañó hasta el punto más profundo de los océanos del mundo, soportando una presión de 16.500 psi. Es enorme y robusto, incluso más grande que el que llevo puesto ahora, y conmemora mi inmersión en solitario. La esfera se degrada del azul al negro, simbolizando el paso de la luz del sol a la oscuridad. El texto verde coincide con el color del sumergible en el que me encontraba. Es una edición especial del Deepsea.
Créditos:
Talento: JAMES CAMERON
Estilo: NIK PIRAS
Fotógrafo: JOHAN SANDBERG
Entrevista: ROBERTO CROCI
Grooming: NADEGE SCHOENFELD
Asistente de estilo: VALERIE TRONOLONE
Asistente de iluminación: ROBERT KOZEK
Segundo asistente de iluminación: PATRICK FREYNE
Digital: CHRIS NICHOLS
Producción: SABRINA BEARZOTTI
Moda: Ropa del propio James Cameron. Reloj ROLEX, Oyster Perpetual Rolex Deepsea en acero Oystersteel con bisel Cerachrom inserto en cerámica negra y brazalete Oyster.
