Cachemira, cachemir o cashmere en inglés, llámalo como tú quieras. Ese tejido que a la fecha sigue siendo sinónimo de clase, lujo y distinción. Seas practicante del quiet luxury o no, este material es un infalible en la temporada otoñal e invernal gracias a su suavidad, ligereza y capacidad de retención de calor. Pero, ¿de dónde nace la magnificencia de esta tela?
El cashmere: Un símbolo de lujo, elegancia y confort en el mundo de la moda
Una fibra de cashmere es seis veces más delgada que el pelo humano. Tiene fama de ser costosa, escasa y hasta cierto punto “rara”, ¡y con toda razón! Pues se obtiene de una singular especie de cabra que vive en las montañas del Himalaya, pero encontrar la cabra no es el problema. Lograr su forma final para la producción de ropa es un proceso complejo y laborioso que requiere una cantidad significativa de fibras para crear una sola prenda. Imagínate. Para tejer una bufanda de cashmere se necesita la fibra de una cabra y la de tres para fabricar un suéter. ¿Ahora entienden por qué cuesta lo que cuesta?
El lujo y calidez detrás del cashmere
Brooks Brothers
Pero, regresemos un poco a los libros de historia. A quien le debemos su popularidad es a nada más y nada menos que Josefina Bonaparte. Cuenta la leyenda que en un viaje a Egipto, Napoleón Bonaparte se topó con una pashmina hecha de cashmere traída desde el valle de Cachemira, al norte de la India (lugar de donde este material recibe su nombre). El militar decidió que esa pashmina era el regalo perfecto para su querida emperatriz. Aunque en un inicio a Josefina no le gustaba nadita, con el paso del tiempo se enamoró de ella por ser super práctica, ligera y al mismo tiempo cálida. Poco a poco la usó con mayor frecuencia hasta que ganó aceptación por todo el continente europeo.
Hoy en día, marcas como Brooks Brothers, se abastecen de las más finas fibras de cashmere para presentarlas en piezas versátiles que van desde suéteres y bufandas hasta gorros y abrigos. Si estás buscando una manera de darle un toque de sofisticación a tu guardarropa sin perder la comodidad, cashmere is the way to go!