Aprende a controlar tu respiración para que puedas concentrarte en lo que realmente importa y así puedas mejorar tus relaciones sexuales.
Seguro has escuchado en más de una ocasión una ambulancia ¿no? Bueno, la respiración es como esa molesta sirena y si hay algo mala en ella puede provocar mayores infortunios como el estrés, la ansiedad y la tensión.
Para realmente mejorar tus relaciones sexuales, tienes que concentrarte tanto en ti mismo como en tu pareja de “una forma mas compleja y profunda”, asegura Jimmy Burgio, instructor de Pure Yoga en Nueva York. La mejor forma de lograrlo es haciendo lo que te encuentras haciendo en este preciso momento, ¿qué? Respirar. Sin embargo, la respiración debe ser mucho más controlada.
Durante las relaciones sexuales, especialmente cuando son con una nueva pareja pueden provocarte nervios y en consecuencia estarás agitado. Estas pensando en mil cosas a la vez cuando en realidad solo quisieras estar pensando en una sola.
La respiración consciente y controlada calma el exceso de ruido y te ayuda a relajar el cuerpo. Así podrás por fin estar enfocado con todo lo que sucede frente a ti y seguramente podrás mejorar tus relaciones sexuales pues el sexo será mucho más agradable. “Te vuelves más hábil porque no vas a estar preocupado por el pasado ni ansioso por el futuro” asegura Burgio.
Esto quiere decir que vas a poder concentrarte en lo que esta sucediendo para poder actuar de una forma realmente dinámica porque simplemente no estarás pensando en lo que sucede afuera.
Y sí, esto puede sonar a cliché, pero el sexo se trata de sentirse bien y disfrutar. Así que, tomar el control de tu respiración es la forma más directa de mejorar tus relaciones sexuales.
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RUTINA DE RESPIRACIÓN PARA MEJORAR TUS RELACIONES SEXUALES
A continuación, te compartimos tres técnicas para dominar las respiraciones conscientes y relajantes. Practicarlas no solamente te ayudará a mejorar tus relaciones sexuales sino también con tu estrés y no son para nada difíciles de incorporar a tu rutina diaria.
IDEAL PARA CUALQUIER LUGAR
Inhala desde el coxis hasta la coronilla y posteriormente exhala en la dirección opuesta, es decir, desde la coronilla hasta el coxis. Si algunas áreas se encuentran tensas, la respiración continua puede relajarlas. Hazlo durante un minuto, por lo menos tres veces al día
CONSEJO
Asocia algún color con tu respiración, por ejemplo, el verde. De esta manera cuando estés a punto de cruzar una avenida y veas en el semáforo la luz verde, te recordará nuevamente la respiración.
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IDEAL PARA SITUACIONES ESTRESANTES
Si te encuentras en alguna situación que te provoca tensión, concéntrate en la sensación que tienes mientras respiras. Por ejemplo, cuando inhalas por la nariz, tu respiración es más fría y al exhalar por la nariz, es más cálida.
Piensa en la respiración fría como un viento tranquilo y la respiración caliente como la tensión de la que tu cuerpo se está deshaciendo.
Conforme vayas concentrándote más en las sensaciones, te darás cuenta de que algunos puntos específicos que estaban tensos comienzan a relajarse.
Hazlo 5 minutos después de despertar, antes de ir a dormir o cuando lo creas necesario.
IDEAL PARA CUANDO ESTAS TENIENDO RELACIONES SEXUALES
Durante las relaciones sexuales, respira conscientemente con tu pareja cuando notas cómo estas respirando y después como es que esta respirando tu pareja.
Si alguno de los dos respira de forma incorrecta o se aguanta la respiración, se dominante y respira más profundamente haciendo contacto visual si es necesario. De esta forma sus respiraciones comenzarán a sincronizarse.
Y obviamente, en consecuencia, se sentirá como algo natural pues estarán respirando juntos.
CONSEJO
Tampoco es necesario que tengas que sentarte frente a tu pareja y decirle “respiremos juntos” Si te encuentras en un momento de demasiada tensión, simplemente concéntrate en tu respiración.
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