Es el lugar más silencioso del planeta, pero ¿por qué perderías la cabeza en este lugar artificial y creado por el hombre?
El silencio absoluto puede relajarte y ayudarte a concentrarte, pero no es el caso de esta cámara que se denomina como ‘el lugar más silencioso del mundo’. Creada por la empresa estadounidense Microsoft y ubicada en su edificio empresarial en Redmond (EE.UU.), esta sala es cuanto menos intrigante.
Capaz de absorber más del 99,9% de los sonidos, entrar en ella y encerrarte sería algo parecido a gritar con una almohada en la boca, ningún sonido sale y ninguno entra.
Este silencio es el que provocaría la locura incluso a la persona más cuerda, ¿por qué? En esta ‘sala anecoica’ impera un silencio sepulcral y total, el cual provocaría una tensión tan seria en nuestro cerebro que afecta directamente al oído.
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Este intenta buscar una fuente de sonido cuando no recibe estímulo alguno, pasando algo increíble: nuestro organismo se convierte en el motor principal acústico y hace de generador de casi todo, desde el pestañeo hasta los latidos y la respiración.
Esto te haría perder la mente rápidamente, ya que el equilibrio al que estás acostumbrado perdería su punto de referencia. De hecho, sólo aguantarías 45 minutos antes de dar síntomas de locura (es el tiempo límite que alguien ha soportado dichas paredes).
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Pero la utilidad de dicha habitación no es la de torturar ni volver loco a alguien, sino servir de laboratorio sonoro para probar los nuevos productos de dicha marca tales como tabletas o nuevas mejoras en Skype.
Para lograr esto se aisló dicho habitáculo en un sótano con un total de seis paredes (algunas de un grosor de 30 centímetros), lo que permitiría oír como un susurro el despegue de un avión fuera de dicho lugar.
¿Te atreverías a pasar un rato dentro?
Crédito de foto: cortesía