No es que el arte sexual tenga reglas matemáticas, pero aprender algunos de los equívocos masculinos mejorará tu rendimiento y actitud.
Puede que hablar con tus amigos de tus prácticas en la cama solucione alguno que otro problema, pero, ¿y qué si todos están equivocados? Descubre qué detesta tu chica y aplícate estas premisas de las que debes partir antes de lanzarte a demostrar cuánto vales.
- No comunicarte cuando te surge alguna duda o piensas que algo va mal. Podría ser el principal error cometido por nosotros, y el principal a solucionar. No temas a preguntar una y mil veces: mejor pecar de preguntón que de inculto sexual.
- No por ser más rudo, ella va a disfrutar más. La delicadeza y la paciencia son cualidades que debes entrenar más a menudo. De nuevo, pregúntale cómo le gusta.
- Quítarte los calcetines. Tu sex appeal se esfumará en un segundo si te metes en las sábanas con esta prenda.
- No es un partido de tenis, no es necesario gemir en exceso. El edificio y tus vecinos ya los ven felices cuando pasean, no es necesario que sepan más. Además, ella lo odia.
- Más vale calidad que cantidad. Si creías que el público femenino se dividía ante la cuestión de que si el tamaño importa, lo sentimos pero no. La metodología importa, y más de lo que crees.
- Tiempo al tiempo. Y los preliminares necesitan un esfuerzo elaborado, no te lo tomes a al ligera -de nuevo la paciencia juega un papel crucial-. Trabaja la zona de tu chica y ocúpate de que el clímax ha llegado.
- Unas cachetadas esporádicas pueden ser agradecidas, pero si te excedes puedes acabar sin novia además de multado.
- Pedir nuevas experiencias está bien, pero si recibes una negativa, no insistas. Esto sólo fomentará un incómodo ambiente del que no saldrá nada productivo.
- Creer en el porno. Lo sentimos, sigue siendo cine y como tal son actores. Intentar recrear una escena en tu recámara sólo hará que quedes ridículo.
- Olvidar el momento de después: es tan importante como los preliminares. Una vez que hayas liberado toda tu pasión y fuerza, es momento de demostrar que ha sido algo más que sexo. Esto te asegurará el hecho de que desee repetir.