Con una tardía reacción del Gobierno mexicano, el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, condenó la política migratoria de “cero tolerancia” que separa a los niños de sus familias en la frontera de Estados Unidos, y la calificó como “cruel e inhumana”.
Según las cifras de ProPública, entre abril y mayo pasados, casi 2,300 niñas y niños migrantes fueron separados de sus padres mientras intentaban llegar a Estados Unidos.
Debido a lo conmovedor de la historia, tal vez la historia más visible sea la de la niña guatemalteca que lloraba mientras los agentes aduanales revisaban a su madre, pero las historias son tantas como cada uno de los niños y niñas separados de sus padres mientras el mandatario estadounidense dice adoptar medidas como parte de la política de combate al crimen organizado, o de los miles de menores que llegan por su cuenta a la frontera tratando de huir de la violencia y pobreza que se vive en sus lugares de origen, entiéndase México y Centroamérica, principalmente.
Además, la UNICEF ha indicado que entre 2015 y 2016, un total de 139, 386 infantes fueron sujetos a medidas de repatriación en la frontera norte de México, y que cada año alrededor de 40,000 menores que migran son repatriados desde los Estados Unidos a México, 18,000 de estos viajan solos.
La justificación expresada por la Casa Blanca para tomar tales medidas la inmigración ilegal alienta a organizaciones criminales a utilizar a menores para instruirlos en actividades delictivas, como la MS-13 (Mara Salvatrucha): “¿Dónde está el clamor por los asesinatos y crímenes causados por pandilleros y matones, incluida la banda (centroamericana) MS-13, entrando en nuestro país de manera ilegal?”.
Donald Trump agregó que su país no se convertirá en un campo de refugiados y aprovechar para criticar a Europa: “Estados Unidos no será un campo de inmigrantes y no será un campo de acogida de refugiados. Lo que está ocurriendo en Europa y otros lugares, no lo permitiré, no bajo mi mandato”, dijo Trump en la Casa Blanca.
Lo anterior lo mencionó debido a los señalamientos que se le han hecho al conocerse la situación de los menores alojados en almacenes adaptados como centros de detención temporal.