¿Cocteles con vodka fáciles y deliciosos? Presta atención, porque esto es básico para convertirte en un héroe ruso detrás de la barra.
Literalmente, vodka significa «agüita». Esta palabra proviene del término ruso voda, que significa agua, y la terminación –ka que funciona como diminutivo. Fabuloso nombre para una de las bebidas más fuertes que se pueden consumir en el cosmos de los destilados. Curioso dato detrás de los cocteles con vodka alrededor de todo el mundo, que siempre se han considerado sumamente sofisticados y para un paladar completo.
El vodka es un destilado que proviene de, prácticamente, cualquier planta o cereal con mucho almidón. Puede ser de la papa, el trigo o la remolacha, entre otros. Y su origen se remonta a la búsqueda de un alcohol cero pretencioso con su aroma y con su color, pero que fuese lo suficientemente fuerte como para soportar los fríos paisajes de Rusia.
Generalmente, esta agüita irónica cuenta con más de 40 grados de alcohol. Hay algunos que llegan a tener hasta 80 o 96; pero esas botellas suelen encontrarse sólo en su patria.
Con el tiempo, el vodka se introdujo en la cultura estadounidense –principalmente después de la II Guerra Mundial– y se hizo un absoluto signo de gusto refinado y resistente. Tan duro fue ese trago a nivel mundial, que el vodka se hizo protagonista de las mezclas más reconocidas en una barra: el martini y el cosmopolitan.

Y si eso no es estilo en una copa, ¡¿qué sí lo es?!
A continuación, te presentamos cinco cocteles que puedes preparar en un santiamén y que te ayudarán a canalizar el Dr. Zhivago que llevas dentro. Elegante, valiente, temerario y un gentleman a su propia manera.
Appletini
Agita 50 ml de vodka, 50 ml de jugo de manzana, 1 cucharadita de jugo de limón y 1 cucharadita de miel de maple en una coctelera llena de hielo. Sabrás que todo está correcto cuando sientas este instrumento muy frío. Cuela en una copa de martini y decora con una rodaja de manzana.
Ruso blanco
Vierte 50 ml de vodka, 25 ml de licor de café y 1 cucharada de crema en un vaso lleno de hielo. Revuelve suavemente. Tan fácil que puede parecer inofensivo, pero no te dejes llevar por las apariencias.
Desarmador
Clásico y ochentero. Exprime el jugo de 1 naranja grande o 2 pequeñas. Si puedes conseguir 1 clementina, mejor. Pon un puñado de cubitos de hielo en un vaso alto y vierte un poco más de 50 ml de vodka, seguido de los jugos. Revuelve con suavidad para combinar y agrega unas gotas de Angostura. Fresco y amargo para un otoño que empieza a enfriar.
Mula de Moscú
Vierte 50 ml de vodka en un vaso metálico, vierte ¾ de hielo picado y llena hasta arriba con cerveza de jengibre. Revuelve suavemente para combinar. Agrega un poco de jengibre en polvo, una rodaja de limón y una ramita de menta para servir. Peculiar y poderoso.
Sea breeze
Llena un vaso alto hasta la mitad con hielo y vierte 50 ml de vodka, 100 ml de jugo de arándano y 50 ml de jugo de toronja. Revuelve suavemente hasta que el exterior del vaso se sienta frío. Decora con una rodaja fina de lima.
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Las recetas suficientes para que vivan en la cabeza de todo hombre que se jacte de habilidad en la barra. Esto y un clima seductoramente invernal; precisión para dar un trago a la entonación de ¡Na zdorovie! *salud en ruso