Todo ha ido bien, según tú. ¿Por qué no te llaman? Un experto nos explica cuáles fueron tus fallos al momento de responder…
“Meter la pata es sencillo. Por lo que decimos, por lo que no decimos y también por cómo respondemos, por cómo usamos el lenguaje verbal y el no verbal» afirma Julio García Gómez, experto en habilidades de comunicación y con amplia experiencia en labores de contratación en grandes empresas. ¿Qué evitar decir en una entrevista de trabajo? El experto te da sus recomendaciones:
1. «Porque su empresa es la mejor»
Hacer la barba parece un buen recurso, y se utiliza como respuesta a la pregunta de ‘¿Por qué quieres trabajar con nosotros?’. Pero es un error: “Ante este interrogante, debemos argumentar y repasar cuáles serán nuestras aportaciones a la empresa, poniendo ejemplos concretos”, aconseja el experto. Alabar a la empresa no está de más, pero en su justa medida; si te excedes, te arriesgas a que el contratador entienda que esa es una contestación de lo más genérica y desperdiciarás la posibilidad de venderte. Por eso, mejor será que utilices fórmulas como “porque creo que puedo aportar mi experiencia a la empresa, captando nuevos clientes o colaborando en planes de expansión, como he hecho en mis trabajos anteriores”.
Serás todo un as de las entrevistas laborales.
2. “Ganar muchísimo dinero”
Sabemos que lo pienses, pero ojo… “Ante la pregunta de ‘¿Qué estás buscando en tu nuevo trabajo?’, el entrevistado suele esperar respuestas contundentes”, afirma el experto. “El contratador valorará mucho que se le responda diciendo que la mayor motivación es integrarse en la compañía para desarrollar nuestras ganas de crecer y poner la experiencia obtenida, más tarde, también al servicio de la buena marcha de la empresa”.
3. «No sé mucho, la verdad»
Respuesta que NO puedes otorgar a la pregunta: ‘¿Qué conoces de nuestra empresa?’ “La labor de investigación previa es fundamental; no basta con saber dos o tres datos, sino que conviene recabar toda la información posible”. Proyectos concretos, número de trabajadores, red internacional…
4. «Lo quiero matar”
Tampoco vas a responder esto, aunque sea cierto, cuando te pregunten por tu relación con tu anterior jefe. “De nuevo, existen muchas fórmulas para decir la verdad. Quizá no se llevaban bien, pero será mejor responder de forma natural, huyendo de apreciaciones personales”, invita el experto.
5. “Soy demasiado perfeccionista”
No vendas como defectos lo que, en realidad, son virtudes. “Ya se presupone que eres trabajador y perfeccionista. Trata de evidenciar rasgos positivos derivados de tus defectos, pero sin pasarte”, sostiene el experto. ¿Cómo? Diciendo, por ejemplo, que ante la tesitura de trabajar en equipo o en solitario prefieres la segunda, pero que eres adaptativo y que estás acostumbrado a trabajar con más compañeros.
6. “¿Y a usted qué le importa?”
Respuesta impulsiva ante preguntas personales. “Aunque está prohibido, algunos contratadores siguen preguntando por aspectos íntimos”, confirma García Gómez. Y aquí, de nuevo, la diplomacia debe ser tu arma, y se permiten las respuestas abiertas.