Si tomas alcohol con moderación y sigues estos consejos, no tiene porque engrosar tu cintura.
Uno de los gustos que más trabajo cuesta dejar cuando se está a dieta es el de las bebidas espirituosas, es decir el alcohol. Pero si lo tomas con moderación y sabes qué tomar, no tiene porque engrosar tu cintura.
Te decimos algunas estrategias para disfrutar de una copa sin culpa.
Sigue la regla de oro
Por cada copa de licor «duro» toma 4 vasos de agua, sugiere Cassandra Forsythe, doctora. Para cerveza, la regla es dos vasos de agua por botella.
Conoce tus calorías
No tienes que contar todo, pero con que estimes lo que estás consumiendo, te mantendrás bien.
? 360 ml de cerveza = 153 calorías
? 360 ml de cerveza light = 103 calorías
? 150 ml de vino tinto = 125 calorías
? 150 ml de vino blanco = 121 calorías
? 100 ml de Sake = 117 calorías
? 45 ml de licor (80 proof/40% alcohol) = 97 calorías
Anticípate
Toma la mano antes de salir. El nutriólogo Alan Aragon recomienda reducir el número de comidas de altas calorías que ingieres durante el día que vas a tomar.
Si vas a salir el viernes, cuida tu alimentación ese día para compensar por lo que vas a tomar. Come proteínas y carbohidratos complejos, nada de dulces o antojos durante ese día.
Previene
Si todo falla, entonces el día que vas a tomar, haz más ejercicio en la mañana. Si sueles comer botanas de altas calorías mientras tomas, el ejercicio te ayudará a prevenir aumentos de peso de manera anticipada, usando lo que comas para reparar el músculo, en vez de guardarlo como grasa.