Mientras el calor aumenta, tú y tu ropa sufren los estragos de la temperatura. Te decimos cómo controlar tus glándulas.
«El parámetro para determinar cuando tu manera de sudar es excesiva, es preguntarte si esta está afectando tus actividades diarias o alterando tu calidad de vida», dice Ana Lilia Ruelas Villavicencio, dermatooncóloga de la Clínica del Manejo de la Imagen Corporal del Hospital Médica Sur. «Si te es necesario cambiarte la camisa dos o hasta tres veces al día y tu manera de sudar te resulta un impedimento en tu convivencia social, entonces requieres ya de atención médica».
Atiéndete
Cuando tu manera de sudar afecta tu vida cotidiana, lo mejor es que consultes, primero, a un dermatólogo y, más tarde y de ser necesario, a un endocrinólogo. «La mayoría de los casos de sudoración excesiva vienen de causas primarias y no indican que se padezca una enfermedad mayor», dice la doctora Ruelas Villavicencio.
Combate el sudor
Hay varios niveles de sudoración y, para cada uno, una solución. Aquí, una escala:
Antiperspirantes. Si sudas mucho durante el día, estos productos con base en sales de aluminio te serán de gran ayuda. La doctora sugiere aplicarlos por la noche, dos a tres veces por semana, para que penetren los poros y tapen las glándulas sudoríparas y, de esta manera, reduzcan la sudoración total. Por la mañana y durante el día, puedes aplicar un antitranspirante.
Medicamentos. Son una muy buena opción para moderar la cantidad total de sudor que segregas, pero tienen efectos secundarios, como la sequedad de la piel y las mucosas.
Toxina botulínica. Antes de ser usado con fines cosméticos, el Botox tenía múltiples usos médicos. Al ser inyectado cuidadosamente (por un médico) en glándulas sudoríparas, disminuye la conexión del estímulo nervioso con la glándula. Puede aplicarse una vez al año, y no presenta riesgos ni efectos secundarios.
Cirugía. Si tu problema ya es de grandes ligas, te podrían recomendar un proceso en que un neurocirujano corta o quema los ganglios para así disminuir el impulso neurológico que provoca la sudoración.
¿Antitranspirante = cáncer?
Diversos estudios han intentado vincular el uso de antitranspirantes con la aparición cada vez más frecuente de cáncer, especialmente de mama o linfoma. La realidad es que no existe ninguno serio que valide esta teoría.
¿Desodorante o antitranspirante?
Mientras el desodorante es solo fragancia que disimula el aroma generado por el sudor, el antitranspirante tiene agentes químicos que se encargan de ocluir la salida de las glándulas, disminuyendo, a la larga, el tamaño de estas y, en consecuencia, la cantidad de sudor que produces. Para gente con niveles normales de sudoración, es recomendable usar un desodorante con antitranspirante, como la mayoría de los que se encuentran en el mercado.