Ver una película de comedia (o algo que te haga reír) puede ayudarte a evitar un paro cardiaco, aseguran científicos griegos.
De acuerdo con los especialistas, cuando la gente se sentó y vio una película de comedia durante 30 minutos, el buen humor mejoró temporalmente la flexibilidad de las arterias coronarias. Esto se explica porque al reír se reduce la producción de cortisol, una hormona del estrés que endurece las arterias, lo cual afecta el flujo sanguíneo y aumenta las probabilidades de sufrir un infarto. Trata de reír a carcajadas varias veces por semana, pero ten cuidado cuando compres palomitas en el cine porque no todas las salas han retirado las grasas trans de la mantequilla.