En tu despensa hay destructores de olor, blanqueadores de dientes y soluciones para el cuidado de la piel.
Quemaduras de sol o irritación del rastrillo
Remedio: Leche
Sumerge una toalla en un recipiente con leche fría y aplica sobre la zona dañada. La frescura puede ayudar a reducir la molestia y el ácido láctico tiene propiedades antiinflamatorias. Después, enjuaga. O prueba con Aceite de oliva, porque contiene compuestos naturales que evitan la inflamación.
Herida leve
Remedio: Miel
Al no contener agua, la miel evita el desarrollo de bacterias. Aplica un poco y cubre con una venda.
Manos descamadas
Remedio: Azúcar
Humedece tus manos y cúbrelas con azúcar. Los granos exfolian las escamas y las células muertas.
Piel y labios resecos
Remedio: Aceite de oliva
El aceite de oliva es muy parecido a tus propios aceites naturales. Pon unas gotas en la palma de tu mano y frótalas en tu piel para suavizar las zonas resecas.
Picaduras de insectos
Remedio: Vinagre de manzana
Aplica un poco de vinagre en cada picadura con un hisopo. La acidez ayudará a reducir la molestia y calmar la comezón intensa.
Pie de atleta
Remedio: Vinagre de manzana
Una mezcla de una parte de vinagre y tres partes de agua pueden matar al hongo que causa infecciones en los pies. Para aliviar el pie de atleta sumerge tus pies en la mezcla por un rato.
Zapatos apestosos
Remedio: Bicarbonato
Espolvorear un poco después de cada uso puede ayudar a neutralizar olores raros. Sólo que no te olvides de quitar el exceso antes de volverlos a utilizar. O prueba con Cáscaras de naranja. Déjalas en tus zapatos durante la noche para sustituir olores bacteriales por una esencia fresca.
Axilas mal olientes
Remedio: Vinagre de manzana
Frota un poco en tus axilas. Las propiedades astringentes del vinagre no permitirán que las bacterias causantes del mal olor crezcan. Y no te preocupes por su aroma, desaparece rápido. O prueba con Bicarbonato, que absorbe el mal olor y te mantiene seco.
Dientes amarillos
Remedio: Cáscara de naranja
Frota la parte blanca de la cáscara en tus dientes, luego quita los residuos con un cepillo de dientes. O prueba con Bicarbonato. Su textura arenosa puede ayudar a aflojar la superficie de las manchas. Mezcla una pequeña cantidad con agua hasta formar una pasta con la que puedas cepillar tus dientes.
Fuente: David Bank, director del Center for Dermatology, Cosmetic and Laser Surgery, en Mount Kisco, Nueva York; Brian Boyé, director de Cuidado Personal de la revista Men?s Health; Jennifer Jablow; Ian B. Fleischer Jr., profesor y director de Dermatología en la Escuela de Medicina de la Wake Forest University, en Estados Unidos; Adnan Nasir, consejero en Dermatología de Men?s Health y director de Dermatología en Wake Research Associates, de Estados Unidos.