El Rey de Reyes hoy ya tiene campeón, ayer se coronó con el máximo ganador de la Serie Mundial: Los Red Sox de Boston dejaron claro que la Serie Mundial siempre les perteneció.
Texto por Jess Hernández
Los Red Sox junto al gran Alex Cora tuvieron claro el objetivo y dieron todo para llevarse su noveno título con dos juegos de sobra, venciendo a los Dodgers con un marcador de 5 – 1 en su propia casa.
El momento decisivo después del triunfo, fue para elegir al MVP (Most Valuable Player) y hubo muchas expectativas respecto a este tema pero, al final Steve Pearce brilló luego de batear dos jonrones en la victoria decisiva, después de recibir su premio comentó “Creces deseando poder ser parte de algo como esto, ha sido un viaje de toda la vida, estar aquí ahora mismo es un sueño hecho realidad.”
Fue el equipo que, desde el inicio de la temporada, peleó y rompió récords para cumplir su cometido, ganaron un récord de franquicia con los mejores 108 juegos de MLB durante la temporada regular de 162 juegos y continuaron esa dominación en la Serie Mundial.
Todo lo hicieron bien, Alex Cora llevó a otro nivel a Red Sox, creando la cultura Red Sox basada en familia, tolerancia, diversidad e inclusión y esto merece una ovación de pie por demostrar que un equipo puede regalarnos magia en el campo y tener una de las más impresionantes temporadas que recordaremos por mucho tiempo. Pero todo eso no lo decimos solo nosotros, los mismos jugadores expresan su gratitud y admiración por Alex, el lanzador Nathan Eovaldi dijó: “Todo lo que hizo funcionó, el solo tiene una manera de hacerte creer”
Y ¿qué sigue para los campeones? continuar con las respectivas celebraciones con el bien conocido desfile en Boston, enlistarse para la acción de la Liga de Otoño en Arizona y la Organización de Béisbol de Corea, es decir que hay béisbol para un buen rato pero, sin duda no será con la misma calidad y emoción de la Major League Baseball.
Gracias Red Sox por una Serie excepcional, gracias Alex Cora por ser el orgullo de que un Latino también puede ganar una Serie y gracias MLB por otra Serie Mundial inolvidable.
¡Nos vemos el próximo año!