La ropa limpia y el medio ambiente a salvo, te damos algunos consejos para que ahorres agua al lavar tu ropa. No dejes de leerlos.
Separa la ropa blanca de la de color, porque las condiciones de lavado para cada grupo son diferentes.
Clasifica la ropa según el grado de suciedad, ya que este determina el programa de lavado que debes escoger.
Llena la lavadora a toda su capacidad. Así evitarás poner más cargas y también usarás menos jabón. Si no tienes suficiente ropa para poner una carga entera, espera a que se junte más.
Entre 80 y 85% de la energía que consume una lavadora se utiliza para calentar el agua. Utiliza programas de baja temperatura siempre que la ropa no esté muy sucia. En principio, el programa en frío o hasta 30 °C es suficiente para la ropa ligeramente sucia.
Sigue las indicaciones del fabricante sobre las dosis adecuadas de detergente.
Utiliza descalcificadores y limpia regularmente el filtro de la lavadora de cal e impurezas: funcionará mejor y ahorrarás energía.
Es preferible el uso de centrifugado de las prendas a la utilización de la secadora, ya que gasta menos energía.
Aprovecha el calor del sol para secar la ropa siempre que sea posible.
Lee la etiqueta con las indicaciones de lavado. Es un consejo básico.
Fuente: IDAE, Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía