Descubre destrezas que posees y que te ayudarán a convertirte en el prototipo del hombre del siglo XXI.
«La clave es hacerlo suavemente», asegura Susan Findlay, directora de la North London School of Sports Massage de Inglaterra. «Usa la palma de tus manos para hacer movimientos fluidos y continuos. Estimula toda la superficie del músculo».
1 Pide a tu pareja que se acueste boca abajo sobre una toalla. Asegúrate de que esté en una posición confortable (puede estar desnuda) y úntale un poco de aceite para calentar su piel.
2 Comienza por los hombros, estimúlalos y, antes de seguir con los brazos, dedícale varios minutos a la parte trasera de su cuello. Masajea la piel y los músculos a través de amasamientos, fricciones y ligeras presiones con las yemas de tus dedos.
3 Después de los brazos, regresa al cuello y dirígete a la parte baja de la espalda ?trabaja en bloques horizontales. Haz movimientos circulares suaves en la misma dirección que las manecillas del reloj, emplea una técnica similar a la de los brazos, pero ejerce presión con el talón de la manos sobre los músculos más grandes localizados junto a la columna vertebral.
4 Para finalizar, usa la palma de tus manos para masajear el área de los glúteos. La terapia debe durar cuando menos 45 minutos. Si te gusta prende un incienso y ambienta con música suave, le propocionará mayor relajación.