Sí, habrá un examen al final. Se llama vida. Te mostramos cómo hacer que tus hijos pasen la prueba con 10. Gánate tus Días del Padre.
1 Las palabras son invaluables
Habla: tu hijo siempre escucha. Según un reporte del Journal of Applied Developmental Psychology, en familias en donde ambos padres trabajan, los papás tienen más impacto que las mamás en el desarrollo de lenguaje de los niños hasta los tres años. Proporciona descripciones creativas y coloridas de las actividades que realizas y de los ambientes en los que te desenvuelves. Usa palabras grandes aunque tu hijo no las conozca. Los niños aprenden mucho por el contexto.
2 Los berrinches no logran nada
«Cuando tu ansiedad se hace evidente lo único que haces es echar más leña al fuego», afirma Hal Edward Runkel, terapeuta familiar y autor de ScreamFree Parenting. Y si optas simplemente por darles el dulce, sólo promoverás su mala conducta. Mejor, cuando el niño comience a gritar, mantén la calma y permanece atento. No lo ignores. Esto le indica que tú no te pondrás nervioso y que él no ganará (nunca). Puede que no funcione a la primera, advierte Runkel, pero es como magia la quinta vez que lo intentas.
3 La competencia promueve la confianza
Los niños de cuatro años en adelante comienzan a competir con sus papás (carreritas al auto, luchitas en el sofá, cosas por el estilo). Tú fluye. Deja que ganen muchas veces, pero no siempre. Luego incrementa el nivel para que cada vez trabajen más para conseguir la victoria. «De esta forma desarrollan el sentido de fuerza y evalúan sus músculos», afirma el doctor Justin Richardson, quien enseña Psiquiatría en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos. Caminarán con más confianza y no serán un blanco fácil para los abusones.
4 Rendirse es difícil
Cuando su hijo de ocho años quiso dejar de jugar beisbol, Runkel le dijo: «Claro, pero le tienes que decir a tu entrenador y a tus compañeros». El niño no pudo hacerlo. Desde ese día ha jugado durante siete años. «Muéstrale a tus hijos el dolor que implica rendirse y dejarán de tomar esas decisiones tan a la ligera», recomienda Runkel. «Si tu hijo te dice que el proyecto escolar es demasiado difícil y que se quiere rendir, está bien», sugiere Runkel. «Pero dile» ?Habla con tu maestro y dile que te vas a rendir y que aceptarás la calificación apropiada?. Créeme, no se rendirá.»
5 Los sentimientos de otras personas importan
Es más fácil conectarse con los demás si comprendes su perspectiva, por eso es recomendable cultivar esa habilidad en tus hijos. Comienza con sus sentimientos. «Diles, ?Oye, ha de ser difícil tener ocho años?. ¿Qué es lo que más te cuesta trabajo??», sugiere Runkel. Luego menciónales personas que conozcan y que están pasando por un momento difícil (como por ejemplo alguno de sus amiguitos con papá desempleado). Pregúntales qué se sentirá estar en el lugar de su amigo. «No siempre tendrán una respuesta, pero por lo menos los hará pensar en el asunto», afirma Runkel.
6 Las peleas pueden ser resueltas
A menos de que uno de los niños trate de aventar al otro por la ventana del automóvil, no digas nada. «En cuanto te involucras a ellos ya no les importa la solución. Lo único que querrán es que estés de su lado», asegura el psicólogo infantil Anthony Wolf, autor de Mom, Jason`s Breathing on Me! The Solution to Sibling Bickering. Si te dan lata, diles que tu solución los castigará a ambos. Aprenderán que el suplicar no lleva a nada. Más importante, aprenderán a hacer acuerdos rápidamente.
7 La independencia se gana
Cuando tus hijos te dicen que se quieren quedar más tiempo en casa de sus amigos, pregúntales a qué hora quieren regresar, y luego el porqué. Si no te dan una buena razón, no hay problema si les dices que no. Si te la dan, «intentalo», recomienda la psicóloga Jannet Edgette, de Estados Unidos. Según investigaciones, cuando los padres otorgan libertad y responsabilidades, los niños desarrollan una moral con rapidez.
8 El éxito requiere concentración
Tal vez no quieras un niño prodigio, pero nuestra sociedad competitiva exige lo contrario. «Es por ello que a los niños se les dificulta enfocarse», explica el doctor C. Andrew Ramsey, profesor de psiquiatría en la Universidad Columbia, en Estados Unidos. Asegúrate de que tus hijos sepan lo que esperas. Primero celebra sus avances y luego explica el valor de la maestría que se logra con paciencia. «No importa que a tus niños les encante Tom Brady o Beyoncé, déjales saber que estas personas se volvieron exitosas porque dominaron una habilidad», afirma Ramsey. «Aprende a atravesar una puerta y después se abrirán otras; intenta cruzar cinco umbrales a la vez y no llegarás a ningún lado.»