Quisimos saber cuál es la queja núm. 1 en cuanto a sexualidad se refiere y esto es lo que encontramos, para que no repitas errores.
La queja sexual más común que tengo es…
Ellas claman porque atiendas sus quejas. Al parecer, de nuevo, la diversificación es una actual necesidad latente. El 26.1 por ciento está cansada de «que siempre hagan lo mismo». Pero hay más, y por desgracia o fortuna, son inevitables por una mayor plenitud desde la decisión de procrear o evitar ETS: 19.7 por ciento se queja de que no quieras usar condón. La que sigue, alude a tus tiempos, según 16.9 por ciento tardas demasiado en llegar al orgasmo. Lo cual es un poco divergente, ya que la eyaculación precoz es muy frecuente.
Por otro lado, en todos los casos en un promedio de 13 por ciento, te percibe como egoísta, no le gusta cómo la estimulas y que pocas veces quieras tener sexo. Desde su punto de vista, los hombres, 31.9 por ciento, se queja de este último punto y coincide -con nueve por ciento- en que deben cambiar sus clásicas dinámicas, diversificarse. Las quejas menos frecuentes se vinculan con tu aspecto personal o peso (ocho por ciento). Mientras cinco por ciento manifiesta disgusto acerca de la calidad de tus erecciones.
Claves de éxito
Comunicación. No hay más, y la base de esta no está en la queja, sino en la propuesta. Tú tendrás tu «guardadito» de aspectos que te desagradan o enojan de ella. Hay que ser cautelosos y establecer la plática de manera natural, como un modo de dimensionar oportunidades de crecimiento para ambos. En términos de salud, placer y bienestar.
Evita
El reproche, el control para eliminar tus «culpas». Y nunca digas algo por lastimar o por sentirte herido. Escucha. Ambos deben ser honestos y dejar claro que es su percepción. No afirmen, adjetiven o categoricen.