Un estudio arrojó que cuando las personas y sus mascotas hicieron dieta y dieron caminatas juntos, ambos bajaron de peso.
Hay pruebas de las personas se parecen a sus perros: un estudio arrojó que cuando las personas y sus mascotas hicieron dieta y dieron caminatas juntos, ambos bajaron de peso. Lleva a tu can más allá del patio para que resuelva su problema. Si no tienes perro, busca a un amigo. O saca a pasear a la linda perrita de tu vecina.
Una de las ventajas de caminar o correr con tu mascota es que, aunque tú sientas pereza, él te animará e insistirá para ejercitarse.
Pero debes tener en cuenta que tienes que entrenarlo poco a poco y tomar en cuenta estos consejos:
1. Si tu perro es de raza pequeña o de patas cortas, es mejor caminar que correr.
2. Su entrenamiento es gradual, empieza por paseos breves y donde lo acostumbres a dejar los hábitos propios de su especie, como distraerse para oler algo o alejarse de ti.
3. Ten paciencia.
4. Cuando escojas el sitio donde correrán, piensa que también debe ser cómodo para él, pues tu estás protegido por tenis pero tu mascota no, y sus patas pueden lastimarse.
5. Si tú necesitas hidratarte, ten en cuenta que él también.
6. Establece horarios fijos que les creen rutinas.
Nota: Debes tomar en cuenta que tu mascota debe ser un perro «adulto», y no un cachorro al que expongas al peligro.