Si quieres mantener tus rodillas y codos en buen estado, es hora de comenzar a hacer ejercicio.
Investigadores siguieron a 75 mil corredores y 15 mil caminantes durante 7 años, y encontraron que estas actividades reducen el riesgo de padecer osteoartritis más y reduce en 50% tu riesgo de ser operado de la cadera.
Los efectos benéficos de correr son dobles. Primero tu cuerpo se adapta al ritmo de las carreras construyendo más cartílago en tus articulaciones y manteniendo los niveles de proteoglycans en esos cartílagos, lubricando y amortiguando tus articulaciones.
El segundo beneficio es que aunque la mayoría de las personas aumentan de peso con la edad, los corredores logran mantenerse 50% más abajo del peso promedio para su edad, dijo el investigador Paul Williams, del Lawrence Berkeley National Laboratory.
¿Cuánto necesitas correr? No mucho.
Williams encontró que para tener estos efectos protectores debes correr entre 1.5 y 3 kilómetros diarios, o entre 12 y 21 a la semana. Por supuesto, puedes correr más si así lo deseas.
La recomendación general es de al menos 75 minutos de ejercicio vigoroso por semana.