El astro colombiano, James Rodríguez, nos compartió sus secretos para alcanzar el éxito.
A la estrella del Real Madrid y de la Selección Colombiana de Futbol, James Rodríguez, no le importa fallar, él sabe que de todos los fracasos se aprende y lo importante es siempre seguir intentándolo.
¿Cómo te decidiste a jugar futbol?
Yo tenía cuatro años cuando empecé a jugar. Fue parte de mi vida siempre. Yo me dije ?quiero ser jugador?.
¿Cuál es tu secreto para el éxito?
Entrenar duro todos los días. Luchar mucho. Si fallas, seguir intentándolo. Yo pienso que al final, todo aquel que ha tenido éxito en la actividad que sea, siempre ha fallado y aprendido de eso. Tienes que quedarte con cosas buenas de las fallas.
¿Por qué crees que eres una figura exitosa?
Cada día quiero más. No me conformo con ser bueno, quiero ser excelente. Esa ha sido una de mis claves desde que era niño. Además tuve gente a mi lado que siempre estuvo apoyándome.
¿Qué responsabilidades conlleva ser una persona exitosa?
Muchas. Siempre están viéndote, desde niños hasta gente grande. Gente que quiere aprender de ti, gente que mira todo lo que tú haces para imitarte. Y sobre todo, todos esos niños que lo ven a uno. Quiero dejar una buena imagen y quiero que ellos vean que soy una buena persona, para que ellos crezcan.
¿Cómo te preparas físicamente para competir en este nivel?
Mucho. Uno tiene que entrenar fuerte, más que los demás para poder ir al campo a jugar y físicamente hay que estar siempre bien. Más en este nivel en donde si estás mal se nota. Así que intento estar siempre bien y entrenar fuerte.
¿Tienes algún ritual antes de cada partido?
No. Yo creo mucho en Dios y solo le pido a él que todo salga bien y dejo todo en su manos.
¿Al igual que fortalecer el cuerpo, fortalecer la mente es importante, cómo lo haces?
Tener una mentalidad fuerte no es algo que se consigue de un día para otro, yo creo que es algo que con las malas experiencias uno aprende a fortalecerse. También es importante no prestar atención a lo que se diga de ti afuera. Estamos en un mundo en el que prácticamente hablan de ti todos los días y uno no puede dejarse afectar por las críticas.
¿Cuáles son los factores, fuera del tema físico, que afectan a un atleta de alto rendimiento?
Uno se tiene que acostumbrar a todo. Aquí tenemos que viajar mucho y jugamos cada tres o cuatro días, quien diga que eso afecta es porque no está preparado. Yo creo que todos los que formamos parte de esto sabemos que el día a día es así y ya está. Hay que hacer todo bien para que se refleje dentro del campo.
¿Qué le recomendarías a quien quiera, al igual que tú, dedicarse al deporte de alto rendimiento?
Yo también fui niño y siempre soñé con estar aquí. Debo decirles que no es un camino fácil. Sin embargo, si tienen muchas ganas, mucha actitud y se aferran a su sueño, pueden lograrlo. Y si fallan deben seguir intentándolo. Yo creo que siempre hay que creer y tener fe en Dios.