Si entiendes bien estos siete secretos convertirás tu relación amorosa en una locomotora incontenible. ¡Compruébalo!
Intercambiar llaves de tu departamento con tu pareja es emocionante. Disfruta el momento, celébralo, bautiza un cuarto o dos. Debes estar en éxtasis. La convivencia marca el punto en el que el nuevo amor comienza a transformarse en una tibia sopa de realidades, falta de comunicación y episodios repetidos de series televisivas. ¿Tiene que ser así? ¿Acaso el compromiso a largo plazo es el asesino del romance, como sugiere un estudio científico reciente, o podemos redescubrir la pasión? Olvida a los poetas y escritores, la ciencia tiene la solución. En esta era tenemos Imagen de Resonancia Magnética e imágenes térmicas de los muslos. La ciencia de la nueva psicología nos permite ser mejores amantes y alcanzar la felicidad. Ahora podemos idear una estrategia que ayude a un hombre a crear un plan que satisfaga su búsqueda de comprensión y su necesidad de acción. Amigo, si nada de esto funciona, al menos ella sabrá que lo intentaste.
1 Envía una solicitud de encuentro
Al acercarse los seis meses consecutivos de relación pasional, el sexo espontáneo -como el que tuvieron entre aquellos arbustos del parque- únicamente ocurrirá en las películas de Kate Winslet. ¿Por qué? Porque ambos están ocupados con el trabajo y el viaje hacia la oficina, además, ¡hay que seguir a tus amigos de Twitter! Y no olvidemos que ellas tienen un ímpetu sexual muy distinto al tuyo. Eso ya lo sabías, pero ¿tenías conocimiento sobre los bonobos?
En un estudio reciente efectuado en Canadá, los investigadores sometieron a hombres y mujeres a mirar videos variados: hombres y mujeres en coito hetero y homosexual, varones y chicas masturbándose, y bonobos -un tipo de chimpancé- haciendo lo propio. Mientras los videos transcurrían, los científicos monitorearon la excitación de sus voluntarios por medio de fotopletismógrafos -aparatos sensibles a la irrigación en el pene o la vagina. Los participantes también calificaron su propia excitación ajustando un aparato virtual.
Los resultados masculinos fueron directos: sus erecciones empataban con el reporte propio. Pero las mujeres fueron una historia aparte. Las chicas heterosexuales dijeron sentir excitación con varones, las lesbianas con mujeres, y ninguna habló sobre los monos. Pero las sondas en sus vaginas revelaron excitación producida por todas las imágenes -animales y humanas. Las mujeres pueden «calentarse» físicamente sin que sus mentes lo noten.
Este resultado empata con un novedoso modelo de respuesta sexual femenina que dicta lo siguiente: el deseo de una chica por tener sexo se activa únicamente cuando ha sido físicamente excitada. Suena improbable, pero puedes hacer que funcione. En palabras de Rosemary Basson, psiquiatra del British Columbia Centre for Sexual Medicine y la Universidad de British Columbia, en Estados Unidos, los motivos de una mujer para tener sexo son complejos e incluyen conexión emocional y un aumento del bienestar general.
Brooke Seal, terapeuta del comportamiento en Vancouver, Canadá, lo expone así: «Ayuda que tanto hombres como mujeres admitan que está bien iniciar intercambio sexual sin necesidad de deseo. Hay que colocar las piezas en sitio -intimidad emocional, disposición, estimulación- y las probabilidades para que el deseo surja aumentarán». Entonces coloca todo eso en su lugar: organiza una fecha y hora, establece la sensación de bienestar y cercanía emocional («Dime más?»). Antes de que te des cuenta, el sexo ocurrirá. Esperar la espontaneidad te tomará una eternidad.
2 Jueguen a la pelota
He aquí un descubrimiento científico que no debe sorprender a nadie que haya observado un partido de volibol: las atletas femeninas de élite poseen mejor flujo de sangre en el clítoris que sus congéneres sedentarias. Investigadores turcos reportaron esta información en una edición reciente del Journal of Sexual Medicine después de estudiar a 25 jugadoras de este deporte y de handball, junto con 25 mujeres sedentarias.
Les hicieron preguntas muy personales -sobre excitación, lubricación y orgasmo -y ellas permitieron que el flujo sanguíneo del clítoris fuera monitoreado por ultrasonido Doppler. Las atletas arrojaron resultados de mejor flujo en la zona baja, además de tener mayores calificaciones en el cuestionario que midió sus funciones sexuales. Esto relaciona al bienestar físico con la satisfacción y desempeño sexuales, de acuerdo con los investigadores, una de las razones por las que los atletas tienen un amor propio tan elevado (echa un vistazo a «Dile que es hermosa»).
El ejercicio conlleva otros beneficios. El Sexual Psychophysiology Lab de la Universidad de Texas, en Estados Unidos, recibió la visita de un grupo de chicas en dos días distintos. La primera jornada observaron un documental sobre viajes seguido de una película erótica. Al día siguiente se subieron durante 20 minutos a una caminadora y vieron otro combo de videos similar. Los científicos que monitorearon el flujo vaginal de las participantes durante ambas exhibiciones (con esas sondas de nuevo) encontraron un aumento de 150% en la excitación cuando iba acompañada de ejercicio. Las rutinas activan el sistema nervioso parasimpático, lo que prepara al cuerpo para una respuesta sexual, según nos dijo la directora del laboratorio Cindy M. Meston, profesora de psicología clínica y coautora de Why Women Have Sex. «Cuando se encontraron en una situación erótica», dice, «sus cuerpos respondieron con mayor rapidez e intensidad a diferencia de las veces en que no hicieron ejercicio».
3 Tócala 50 veces
Si te atraviesas con ella 50 veces cada día, tócala esas 50 veces. En los hombros, las rodillas, el antebrazo… Cada una de esas zonas está plagada de fibras nerviosas llamadas C-tactile, enfocadas al placer. Si las acaricias correctamente -con la presión de un pincelazo y a una velocidad de 1-10 centímetros por segundo- enviarán señales al sistema límbico, el área del cerebro asociada con la confianza y el cariño.
Las caricias no sexuales ejercen un enorme poder en el cerebro, y la identidad de la persona que acaricia es crucial, de acuerdo con investigaciones de la Universidad de Virginia, en Estados Unidos. El neurocientífico James A. Coan y sus colegas monitorearon con una máquina de Imagen de Resonancia Magnética a 16 mujeres casadas, y les advirtieron que recibirían descargas eléctricas menores. Este dato les indujo niveles severos de ansiedad, lo que quedó registrado con creces en las máquinas. Pero, cuando sus esposos las tomaron de la mano mientras les hacían la prueba, los resultados mostraron disminuciones considerables en los niveles de estrés, mucho mayores a diferencia de cuando fue un extraño el que les brindó apoyo.
Una de las razones por las que los humanos tenemos relaciones, en palabras de Coan, es para distribuir las ideas de resolución de problemas a través de distintos cerebros. Cuando alguien nos ayuda a lidiar con situaciones, nuestras mentes no requieren trabajar tan duro. Es por ello que el estudio de Coan demostró que las mujeres con matrimonios sólidos tuvieron menor activación de estos circuitos cerebrales al ser sostenidas por sus esposos.
4 Escucha, escucha y escucha más
Planea una noche para ambos. Enciende velas, pon un disco de baladas, sosténganse de las manos a través de la mesa mirando a los ojos del otro y discutan sobre el tipo de alfombra que mejor le va a la sala. Las mujeres aquilatan los momentos en que ambos comparten intimidad y conversaciones, mientras que los hombres buscamos sexo encima de la lavadora. Cuanto más puedas comprender esto, más conseguirás construir una relación satisfactoria. Investigaciones realizadas por Gurit Birnbaum en el Interdisciplinary Center Herzilya, en Israel, y Harry Reis, de la Universidad de Rochester, en Estados Unidos, mostraron una correlación entre la respuesta no sexual y el interés por tener sexo. Traducción: charla sobre tapetes y ella comenzará a pensar en excelentes usos para ellos. «Responder correctamente a las necesidades no sexuales de tu pareja es importante porque implica tu preocupación por su bienestar», dice Birnbaum. «Una de las mejores estrategias de un hombre para que su chica se sienta especial y deseada es escuchar y poner atención sin interrumpir o prejuzgar. El deseo sexual crece al fomentar la intimidad».
5 Sé gentil
¿Sabes lo rápido que una chica reacciona a las señales de rechazo? En casi 250 milésimas de segundo. Así de rápido. Y esa reacción desencadena una cascada de procesos que cambiarán el sentido de su humor.
Sabemos esto por experimentos como el de Vivian Zayas, directora del Personality, Attachment and Control Lab en la Cornell University. Ella colocó «coronas» con electrodos a algunas mujeres para medir la actividad cerebral. A través de un par de audífonos, las voluntarias escucharon una voz decir cosas como: «Si necesito ayuda de mi pareja, él se comportaría?.» Las conclusiones eran dos, «distante» o «consolador». Las neuronas se dispararon ante el frío golpe del rechazo. En contraste, la aceptación produjo muy poca actividad cerebral. «Antes de que tome conciencia de lo que siente, en un abrir y cerrar de ojos han ocurrido muchas cosas en su mente». Ella cree que las mujeres pueden ser más sensibles y responder con más fuerza a esas señales interpersonales a diferencia de los hombres. «Si nosotros entendemos esta parte de la conducta femenina, algunas de ellas pueden procesar el rechazo mucho antes de entenderlo, tal vez seríamos capaces de regular esas emociones. «Esto se conseguirá con una comunicación clara».
6 Aprende chino
Si no expresas tu amor de modo que ella comprenda, es lo mismo que si le hablaras en mandarín. Este es el argumento de Gary Chapman, quien escribió The Five Love Languages, que ha vendido seis millones de copias. Chapman, asesor de matrimonios durante más de 30 años, dice que cada uno de nosotros reacciona primordialmente a un lenguaje de amor especial (tiempo de calidad, palabras de reafirmación, regalos, actos serviciales o contacto físico). Si sientes el amor por medio del sexo (contacto) y ella lo siente cuando limpias la casa (servicio), entonces es posible que tallar el excusado sea el camino a una mejor vida sexual.
«El amor es intencional, requiere esfuerzo», añade Chapman. Comienza por averiguar por medio del siguiente test qué hace a tu pareja sentirse amada. Pídele que numere lo siguiente en orden de importancia.
Me siento especialmente amada cuando alguien expresa agradecimiento por mí y las cosas que hago.
Me siento especialmente amada cuando una persona me da su atención total y pasa tiempo a solas conmigo.
Me siento especialmente amada por alguien que me trae regalos y otras expresiones tangibles de amor.
Me siento especialmente amada cuando alguien me ayuda con el mandado o en los deberes del hogar.
Me siento especialmente amada cuando me lo expresan por contacto físico.
¿Ya entendiste? Pasa el resto de la semana enfocado en su elección primordial.
7 Usa químicos
Afrodisíacos poderosos circulan a través del cuerpo de tu amada en este mismo momento. Son tus aliados sexuales.
Epinefrina. La hormona que llamamos adrenalina es producida por tus glándulas adrenales en respuesta al pánico o el miedo. Algunas teorías sostienen que cualquier tipo de excitación que estimule una respuesta de «huye o pelea» es capaz de afectar la atracción sexual y la libido. Llévala a los juegos mecánicos. Cualquier clase de montaña rusa tendrá una recompensa extra además de los alaridos, aseguran Científicos de la Universidad de Texas, en Estados Unidos.
Oxitocina y vasopresina. Producen sentimientos de confianza y cariño. En un estudio suizo, varias parejas utilizaron un atomizador nasal con oxitocina y terminaron discutiendo más civilizadamente que aquellas que usaron un placebo. Los humanos liberamos una oleada de esta hormona durante el orgasmo, lo que podría explicar la necesidad de acurrucarnos después del coito. Algunos estudios revelan que las chicas sienten un golpe de oxitocina cuando son tomadas de la mano por su pareja.
Testosterona. Esta hormona masculina también es producida por ellas, se asocia con el ímpetu sexual. Las mujeres con libido baja pueden recibir una prescripción de testosterona. Hay maneras naturales de elevarla. Los deportes competitivos y físicos disparan los niveles de la hormona, de acuerdo con investigadores de la Universidad de Penn State, en Estados Unidos. Como ellas tienen cargas menores de testosterona de inicio, el golpe es mucho mayor que para los hombres durante una competencia.
Sólo dile de forma directa que es hermosa…
Un estudio realizado en Penn State monitoreó a 300 mujeres durante una década para medir cambios en su sexualidad y el resultado no fue positivo. Casi 39% reportó tener menos actividad sexual, y 29% dijo no disfrutarlo como antes. La razón principal: la insatisfacción con su físico distrae al cerebro durante el coito. Una de las participantes del estudio, Brooke Seal, afirma que las mujeres reaccionan con sorpresa cuando se les dice que sus parejas tienen una percepción de sus cuerpos distinta a la que ellas consideran. Le corresponde a los hombres aclarar este asunto. Para hacerlo, de acuerdo con Seal, usa palabras y acciones -tocar su cuerpo y poner atención a todo, en vez de enfocarte en la penetración.
Marta Meana, psicóloga de la Universidad de Nevada, en Estados Unidos, colocó goggles a 20 hombres y 20 mujeres heterosexuales para monitorear movimientos del ojo al observar imágenes eróticas y no eróticas de mujeres y hombres interactuando. Ellos pasaron más tiempo mirando las imágenes del sexo opuesto. Los ojos de las chicas, por otro lado, fueron atraídos de igual manera por ambos sexos. Meana dice que es difícil explicar la razón detrás de esa respuesta. ¿Significará que ambos sexos les producen excitación o estarán comparando sus físicos con el de otras mujeres? «Existe un elemento de ego determinante en la sexualidad de las chicas», admite Meana. «Necesitan estar convencidas de que son deseables para poder creer que alguien las puede encontrar atractivas». Así que hazle cumplidos con frecuencia, y no necesariamente sobre su trasero.