Con 143 mdd, el Mercedes-Benz 300SLR impone marca como el auto más caro del mundo

Uno de los dos modelos existentes del Mercedes-Benz 300SLR, fue subastado en 143 millones de dólares, imponiendo nuevo récord mundial.

En 1955, Mercedes-Benz fabricó un coupé denominado 300SLR Uhlenhaut, del cual quedan únicamente dos en todo el mundo.

Uno de ellos impuso récord como el auto más caro del mundo tras ser vendido a un coleccionista privado.

El pasado 5 de mayo se subastó en Stuttgart el 300SLR Uhlenhaut, vendido en 143 millones de dólares. La noticia apenas se ha dado a conocer, junto con la cifra.

El récord anterior, de 70 mdd, erade un Ferrari 250GTO de 1963, comprado en 2018 por el CEO de WeatherTech, David MacNeil.

Mercedes no ha dado a conocer el nombre del comprador del 300SLR, pero se sabe que es «una figura conocida de la industria automotriz de Gran Bretaña y un coleccionista de automóviles especializados de larga data».

El dinero obtenido será destinado a becas educativas

Tras dar a conocer el anuncio de la venta, Mercedes señaló que el dinero se utilizaría para establecer el Fondo Mercedes-Benz. Este busca «proporcionar becas educativas y de investigación en las áreas de la ciencia ambiental y la descarbonización para los jóvenes» de todo el mundo.

Este fondo apoyará a universitarios que trabajen en proyectos de ciencias medioambientales.

«Los cupés 300SLR Uhlenhaut son hitos en el desarrollo de los coches deportivos y elementos históricos clave que han dado forma a nuestra marca», dijo el director general del Grupo Mercedes-Benz, Ola Källenius, en un comunicado.

«La decisión de vender uno de estos dos deportivos únicos se tomó con un motivo muy sólido: beneficiar a una buena causa. Con el Fondo Mercedes-Benz queremos animar a una nueva generación a seguir los pasos innovadores de Rudolf Uhlenhaut y a desarrollar nuevas tecnologías sorprendentes, en particular las que apoyan el objetivo crítico de la descarbonización y la preservación de los recursos. Al mismo tiempo, conseguir el precio más alto jamás pagado por un vehículo es extraordinario y humilde».

La compañía sólo construyó dos versiones de techo duro del 300SLR de carreras, y los coches, de 1955, fueron utilizados por Uhlenhaut y otros ingenieros de Mercedes para impulsar la tecnología de carreras.

El coche, con sus puertas en forma de ala y su elegante carrocería, lleva el nombre del ingeniero Rudolf Uhlenhaut.

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