Los nuevos Santos Dumont XL de Cartier sorprenden. Conoce las complicaciones de cada reloj y cómo se relacionan con su gran historia.
Los nuevos Santos Dumont XL de Cartier sorprenden con sus complicaciones y la larga tradición de Alta Relojería que hay detrás de ellos.
LA HISTORIA DETRAS DE LOS NUEVOS SANTOS DUMONT XL
Hay relojes que se vuelven símbolos indiscutibles en el mundo de la Alta Relojería, y uno de los más especiales sin duda (y que cuenta además con el honor de ser el primer reloj de pulsera masculino en el planeta) es el Santos de Cartier, aquella pieza que vio la luz en 1904 como fruto de la cercana y muy fraternal relación de amistad entre el aviador brasileño Alberto Santos Dumont y Louis Cartier, fundador de la Maison Cartier, quien lo diseñó para su amigo con el fin de que viera la hora en pleno vuelo.
El año relojero llegó por parte de Cartier con el anuncio del Santos Dumont XL, un conjunto de tres relojes realizados en una serie limitada y grabados exclusivamente en 30 distintos ejemplares, presentados en un estuche digno de las piezas que alberga.
Todos van al ritmo del movimiento mecánico 430 MC de cuerda manual de la marca; además de la belleza de cada uno, entre las sorpresas más gratas es observar los artes posteriores en cada uno: nada más que los diseños más famosos y reconocidos de los aviones del histórico aviador brasileño.
Los nuevos Santos Dumont XL sorprenden por su diseño perfecto, por la reinterpretación de sus proporciones y por líneas puras y movimiento mecánico de cuerda manual. Al contemplarlo solo podemos coincidir en que con dificultad hay una mejor pieza para conocedores del arte relojero. Aquí sus características.
EL SANTOS DUMONT “LE BRÉSIL”
Caja de platino, una esfera plateada adornada con 12 números romanos metálicos y pulidos, agujas en forma de espada y un rubí en la corona. Es una edición limitada y numerada de 100 pie- zas que en su reverso tiene grabado “Le Brésil”, inaugurado el 4 de julio de 1898. Fue el diseño del primer avión de San- tos Dumont, “el más pequeño y el más bello”, en sus propias palabras.
EL SANTOS DUMONT “LA BALADEUSE”
Tiene caja de oro amarillo, fondo de esfera color champán, corona de cuerda de zafiro, agujas en forma de espada azules y correa de piel verde con acabado brillante. Es una edición limitada y numerada a 300 piezas con grabado en la parte trasera de “La Baladeuse”, o “No 9”, un dirigible motorizado experimental con el que el genio brasileño de la aviación voló en 1903: un pequeño monoplaza destinado a su uso personal. Ironías de la vida, esta cita de Santos Dumont: “Llegará el día en que estos ómnibus aéreos permitirán transportar turistas y personas que viajen por negocios”. Sin duda, un visionario.
EL SANTOS DUMONT “No 14 Bis”
Bisel de oro amarillo sobre caja de acero, fondo de la esfera en gris antracita, corona de cuerda de espinela azul y agujas en forma de espada de acero dorado. Edición limitada de 500 piezas con grabado de “No 14 Bis”, una aeronave descrita como una “cometa con compartimentos” porque el piloto, de pie en el fuselaje, estaba conectado al mando y a los alerones por cables.
Texto por Alfonso Parra