Las normas que todo hombre debe conocer sobre esta mítica prenda masculina.
1. Sastre vs. hecho a la medida. Hay una gran diferencia. Traje sastre significa cortado y hecho a mano para un individuo, haciendo un sólo patrón en papel: el suyo. El hecho a la medida usa patrones preexistentes y confeccionadas que se rehacen según las medidas de alguien, con la esperanza de que le quede razonablemente bien.
2. La vestimenta sastre es un arte. Así como un artista pinta una obra de arte, un sastre cose un traje.
3. Mito: cuanto más cueste un traje, es mejor. La única razón por la cual un traje sastre o cualquier otro traje, cuesta más, es simplemente por el precio de la tela, la cantidad de trabajo manual que implica o, por otro lado, el orgullo total de una etiqueta de diseño.
4. Ten dos pares de pantalones para cada traje sastre. Así el traje durará diez veces más.
5. El cliente siempre debe lograr que su traje se haga como él quiere y con los detalles que quiere en su prenda. Algunos sastres pueden no estar de acuerdo con esto, pero el cliente tiene la razón.
6. No hay tal cosa como un traje sastre que quede mal. A menos que el cliente de repente gane o pierda peso.
7. No todos los sastres son iguales. Algunos sastres son meros técnicos que ejecutarán lo que tú quieres; otros son diseñadores de trajes sastre y pueden aconsejarte bien sobre lo que te quedará mejor.
8. Nunca apures a tu sastre. Cuando se trata de mandar hacer tu traje sastre, ¿lo quieres con prisas o bien hecho?
9. Lava tu traje sastre en seco sólo una vez por temporada. Sólo debe plancharse a mano, preferiblemente por el sastre que lo hizo, ya que a los técnicos del lavado en seco no les importa, y son pocos los que saben cómo hacerlo.
10. Cuando se trata de un guardarropas, un hombre sólo puede tener una esposa -y esa esposa es su sastre.
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