Existen ciertas reglas que te ayudarán a elegir los acordes cromáticos que te sentarán mejor.
Todos nos preocupamos por saber cómo se combinan las diferentes prendas que vestimos. De acuerdo, puede ser importante poner en orden estas tonalidades, pero no dejes pasar por alto que existe un factor decisivo para el color de tu guardarropa: tu tono de piel. Es algo que no podemos alterar durante la semana, por lo que adaptar nuestro armario será la opción más coherente: ojo, puede que lo estés haciendo mal desde hace tiempo y aún no lo sepas.
Vamos a distinguir según tres paletas distintas:
1- Cutis pálido (especialmente pelirrojos, hombres con pecas y rasgos extremadamente blancos): colores como el vino, el verde botella o azul oscuro sacarán más partido a este rostro. Hay que procurar evitar los colores pastel, ya que te lo harán aún más pálido, mientras que si piensan en un blanco, mejor sustituirlo por camel, color arena o caqui. Asimismo, si eres de piel rosada, elimina de forma radical el color rojo de tu cabeza.
2- Piel de tonalidad clara: deberás de buscar prendas más oscuras a tu tez, por ejemplo el gris, beige, rojo o colores impactantes como el dorado pueden ir acordes. Por supuesto el negro será un buen acierto.

(Tranquilo, no tienes por qué tirar -aún- la mitad de tu guardarropa)
3- Tez de color intermedia: tendrás la ventaja de poder elegir una gama más amplia, sin tener que limitarte a una paleta más restringida. Tanto el blanco como el negro estarán permitidos (siempre y cuando en la práctica el color parezca encajar), azul oscuro, rojo o el beige también están permitidos. Incluso para los más atrevidos el azul claro o celeste puede ir acorde, aunque es un color que no sienta bien a todo el mundo.
4- Piel oscura: el juego de colores en el que consigas contrastar es la clave. El blanco, gris claro o amarillo serán tus mejores aliados. Incluso el fucsia, verde o azul intenso puede encajar con tu tez.

(Sí, te llevas equivocando mucho tiempo..)
5- Piel amarilla: caucásicos y asiáticos principalmente. Existen tonalidades que no favorecen nada dicha tez, entre ellos el blanco, ya que la harán más pálida, mientras que el color piel (o nude) y el propio amarillo son acertados. Los tonos pastel tampoco son el mejor amigo de dicha piel, ya que la apaga, al igual que los colores brillantes que darán una apariencia casi enfermiza. ¿Qué vestir entonces? el azul, verde, amarillo, gris o negro -no muy oscuro- deberán de estar presentes en dichos guardarropas.
Como podrás comprobar, la regla general que debes de aplicar y tener en cuenta es no buscar vestir tu cuerpo con el mismo tono de tu piel, e igual modo de tu pelo. El contraste es lo correcto, mientras que, por supuesto, en la práctica cada color puede resultar un acierto o un error de forma sorpresiva.
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