¿Te has preguntado de qué lado debes portar el reloj de pulsera? Esta es la respuesta con base en la historia de este accesorio icónico.
Cuando pensamos en qué ponernos, siempre nos fijamos en la camisa, el pantalón y los zapatos, y si queremos algo extra buscamos el saco o el suéter, pero ¿y el reloj de pulsera?
Pocos son los hombres que buscan accesorios para complementar su outfit, llámese mancuernillas, corbata, brazaletes o el reloj de pulsera, pero cuando se trata de decidir en qué mano va, he ahí un dilema.
Aunque parece que es algo común que como hombre no te puede faltar, siempre han existido diversas dudas respecto a qué mano debe ser la que lo lleve:
Existen muchas ideas sobre llevarlo en la mano derecha es más común en mujeres, mientras que en la izquierda es sin duda es más masculino.
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Un poco de historia del reloj de pulsera
Aunque no lo creas, esta tendencia viene desde hace muchos, muchos años. Por allá del siglo XV, los relojes portátiles o de mano o bolsillo, eran fabricados por Peter Henlein, quien se basó en el descubrimiento del muelle de tracción:
Un muelle de tracción permitía sustituir el péndulo por la transmisión y el volante, elementos que permiten a un reloj ‘marcar el ritmo’.
Así es que el muelle de tracción es el primer gran descubrimiento que dio paso a la creación del reloj de pulsera.
En 1812, Abraham Louis Breguet construyó el primer reloj de pulsera para Caroline, reina de Nápoles y hermana menor de Napoleon.
Pero fue mucho tiempo después, para ser exactos en los años 50 del siglo XIX, en Suiza que se convirtió en un accesorio de uso femenino y de precio más accesible.
El reloj de pulsera masculino
En la Primera Guerra Mundial, que los hombres empezaron a utilizarlo como complemento de bolsillo, y de aquí que los sastres incorporaran una pequeña bolsa en la parte de enfrente de los chalecos masculinos, así resultaba más fácil mirar la hora, mientras se sostenía de una cadena llamada ‘Albert chain’ o leontina.
Con el paso del tiempo, esto ya no era lo suficientemente cómodo, así que por
petición del piloto brasileño Alberto Santos Dumont,
se empezó a usar en la muñeca el reloj.
Así le resultaba más fácil voltear a ver la hora sin necesidad de distraerse demasiado del volante durante una competencia. Ahora que ya sabes cómo fue que se empezó a usar el reloj, pasemos al dilema que todavía atormenta a muchos, en qué mano debe llevarse.
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¿En qué mano se debe llevar el reloj?
Todo comienza por el diseño aunado de ser diestro o zurdo, ya que la mayoría de las personas usan la mano derecha con regularidad, dejando la otra mano libre, y por ende, sería la idónea para llevarlo.
Un ejemplo, por inercia tomamos el vaso de agua con la derecha y si llevásemos ahí el reloj y nos piden la hora, como acto siguiente seria voltear nuestra muñeca como acto reflejo, lo que nos llevaría a tirar el líquido.
Existe otra idea más allegada a la funcionalidad: guiarnos por el lado en el que se encuentren las perillas para ajustar la hora.
Si están del lado derecho, es más fácil llevarlo de ese lado ya que con la otra mano lo puedes ajustar sin necesidad de quitártelo, y lo mismo sucede del lado contrario.
Lo cierto de todo esto es que no existe una regla definitiva, no hay algo absoluto al respecto, sino más bien a qué funciona mejor para ti y qué te resulta más cómo llevar.
Lo que no se debe olvidar es que siempre será una pieza clave para resaltar el atuendo, así que al final es tu decisión. ¿De qué lado prefieres llevarlo?
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