Quizás no habías escuchado hablar de David Corenswet antes, pero estamos seguros de que después de participar en The Politician, la nueva serie de Netflix que se enfoca en una elección estudiantil, lo estarás viendo mucho más seguido.
David Corenswet originario de Filadelfia se tomó el tiempo de hablar en exclusiva con Esquire sobre cómo fue trabajar en este proyecto (que definitivamente te recomendamos) y lo que haría si fuera presidente.

ESQUIRE: ¿Cómo decidiste dedicarte a la actuación?
DAVID CORENSWET: Mi papá era actor, él fue a la universidad y después decidió mudarse a Nueva York para convertirse en actor, pasó siete u ocho años haciendo principalmente teatro, fue extra en las novelas y así… y aún así, él nunca nos insistió a mí o a mi hermana en tomar esa dirección, pero sí nos crió con películas clásicas y comedias musicales y aparentemente, no recuerdo bien, pero vi a mi hermana en una producción de “El Violinista en el Tejado” en el teatro de la comunidad y le dije a mi papá «quiero hacer eso” y me dijo ‘de acuerdo’, y empezó a buscar audiciones para mí; Filadelfia es un lugar con mucho teatro, hay muchos teatros viejos y originales.
Sucede que había una producción de ‘All my sons’ y hay un niño chiquito que aparece en algunas escenas del primer acto y, creo que mi tarea era decir un solo chiste y conté uno sobre un pato que entra a un bar y pide un jabón y aparentemente eso fue suficiente pues después de unas semanas de decir que quería actuar me dieron ese papel.
Hice mi primer papel oficial a los 9 años, debo de haber estado en cuarto grado y de ahí fui saltando de obra en obra, hice Macbeth con la Philadelphia Shakespeare Company, hay un grupo súper talentoso en Filadelfia que trabajan por todos lados, los conocí bien y acabé haciendo 5 o 6 obras y musicales antes de tener 15 años.
ESQUIRE: ¿Qué disfrutas más, el cine, televisión o teatro?
DAVID CORENSWET: Le tengo un profundo cariño al teatro porque es lo que he hecho toda mi vida y esa fue mi escuela, pero me encantan las películas, siempre me han gustado. La primera vez que actué en una película, fue una película estudiantil y yo tendría 17 o 18 años entonces ya había hecho teatro durante mucho tiempo.
Es muy diferente para un actor, en el teatro tienes 4 semanas de practicar antes de que lo vean… y en la película llegas el primer día y lo primero que haces es capturar una escena por siempre, y es difícil acostumbrarse, pero lo que más me entusiasmó eran los demás, el camarógrafo y el de sonido, los de vestuario, los de iluminación, es un espacio colaborativo donde todos son buenos en lo que hacen y todos están trabajando al mismo tiempo en sus pequeños proyectos, construyendo para el momento que digan ‘acción’ y como actor, es tu trabajo ser grandioso cuando llega tu momento, cortan y empiezas de nuevo.
Es una tormenta perfecta de colaboración y hay mucha creatividad y resolución de problemas. Pero pienso que el teatro pesa más en los actores que el cine… me gusta mucho estar en set, pueden pasar horas y me la paso muy bien, me gusta lo que los demás hacen, ver y aprender, ver a los de producción fijarse en los detalles, pienso que es muy cool que haya tanta presión en lo que la gente está haciendo.

ESQUIRE: ¿Qué fue lo que te atrajo a participar en The Politician?
DAVID CORENSWET: Lo que me interesó fue hacerlo en general… salí de la escuela hace un par de años y tenía muchas ganas de estar trabajando, creo que la mayoría de los actores lo quieren, audicionamos y trabajamos durante el día. Estaba emocionado por una oportunidad de estar en set y estar con gente.
El guión es de Ryan Murphy, sabía que había hecho series increíbles y sabía que en lo que fuera que estaba trabajando él, valía la pena participar. Me intrigó mucho el guión pues tenían muchas escenas con muchos diálogos muy inteligentes y audaces, pero raro y oscuro, chistoso también… reía mucho leyendo el guión, que no es común… yo sentado en mi cuarto sólo riendo mientras leo el guión y pensé que… normalmente cuando un actor lee un guión, te das cuenta del tono, si es una comedia o un drama, pero yo no podía descifrar el tono… me reía pero no sabía si sólo yo lo encontraba chistoso.
Había partes que decía “ok, esto es muy oscuro y dramático” pero no tenía idea, creo que le dije a un amigo “leí el guión y creo que no es para mí porque no lo entiendo”. Llegué a pensar que no sería parte de esto porque no lo entendía, pero después me di cuenta que eso es lo que caracteriza a Ryan y su equipo, tienen un tono propio, no caben en un género especial.
También hubo otros elementos que me llamaron la atención… me seleccionaron y a la semana siguiente ya estábamos en el set… llegué pensando que no lo entendía y fue bonito que mi primer día fue con Gwyneth (Paltrow) y mi segunda escena con Lucy (Boynton); llegas y tienes suerte de trabajar con actores que son perfectos para el papel y que agregan tanta claridad al proyecto, ese primer momento en mi escena con Lucy, todo hizo click y todo hizo sentido. No se trata de que yo lo entienda, es ver como se unen todas las piezas y eso regresa a la naturaleza colaborativa del cine de Ryan, y Brad e Ian y el equipo de actores y producción para hacer posible esto.
E: Ahora que mencionas a Gwyneth, en tu primera escena con ella hablan en mandarín, ¿es algo que ya sabías o tuviste que aprender?
D: Ah si… para nada, ni una palabra. Siempre creí que sería imposible aprender mandarín, había escuchado que era imposible aprender por las entonaciones y los tonos, pero tuvimos un gran coach y casi toda mi preparación para la escena era aprender esas 15 palabras que debía decir, era repetir mucho e imitar y luego el primer día Gwyneth me dijo “ podemos practicarlo, porque no tengo idea de lo que estoy haciendo” y pensé “perfecto!”

E: La primera vez que vemos a River (el personaje de David Corenswet) nos damos cierta idea de quién será, un niño riquillo y mujeriego, pero conforme avanza la serie nos damos cuenta de que es mucho más complejo y es un personaje con diferentes niveles, ¿cuál fue el mayor reto de interpretarlo?
D: Creo… diré dos. Uno es, hay una escena muy emocional frente a unas 200 personas en un auditorio, y para mi… bueno, fue difícil, pero siempre tengo problema con ese aspecto porque nunca aprendí a llorar.
Hay quienes pueden hacerlo sin problema y es increíble, pero yo no puedo, siempre me estoy divirtiendo tanto en el set que es difícil adentrarme en la parte oscura del personaje. Probablemente el mayor reto con el personaje es que él es el centrado, calmado, alguien que no es ambicioso ni trata de descifrar a la gente, es más como una fuerza estabilizante de la conciencia, algo que fue muy difícil es que todo el tiempo que estuve en el set creí que todos hacían algo increíble con sus personajes y yo me sentía como si no supiera si estaba siendo tan claro como los demás en lo que hacía.
Creo que River es más “normal” que no opera en el mismo nivel que los demás y me hacía sentir que no estaba haciendo lo correcto.
E: ¿Tienes algo en común con River?
D: Si, mis amigos cercanos dicen que soy algo parecido a una fuerza estabilizadora y calmante, soy bueno en una crisis. No recuerdo si está en el piloto o en el guión original, River tiene entrenamiento y medita y yo he hecho bastante meditación en mi vida, esas son las cosas principales.
¡Ah! Y le importa cuidar de la gente, creo que a él y a mi nos da mucha alegría poder ayudar a la gente con sus retos y dificultades y eso sería otra cosa que tenemos en común.
E: ¿Puedes relacionarte con su experiencia de prepa? ¿Encuentras alguna similitud con la tuya?
D: Para nada, no era atleta, creo que técnicamente me postulé para presidente de clase en mi primer año y no gané, ni cerca de ganar.
Creo que di un discurso que no fue nada bueno, intenté ser chistoso y fallé miserablemente. Cambié de escuela en prepa, no conocía a nadie y me tardé en acoplarme. La mayoría de lo que hacía en prepa eran musicales y teatro… no era el centro de atención.

E: ¿Cómo crees que la audiencia reaccionará a este programa?
D: No tengo idea. No puedo imaginar que la gente no lo ame. Yo lo amo. Ya vi los ocho episodios. Es raro al principio verte a ti mismo, las cosas han cambiado mucho de cuando lo grabamos y cuando se escribió el guión, hacen magia con la edición… cuando llegué al tercer, cuarto capítulo, me perdí completamente en el (programa) y pensé si esto está en la computadora, seguro la veía completa en una sentada.
E: Sí, definitivamente es muy entretenida y nunca te esperas lo que pasará después.
D: Pienso que de cierta forma es muy fácil hacer un programa en el que no sepas qué va a pasar después, que sucedan cosas inesperadas, pero lo que es impresionante del show y los escritores, es que pueden hacer algo totalmente inesperado y que se sienta que no podría haber pasado de otra forma, entonces la historia es muy intensa y enfocada , especialmente después de algunos capítulos, cuando ya conoces a los personajes y sus trayectorias… todo hace sentido, pero también llega a lugares que nunca te hubieras adivinado, para el episodio 6 o 7 tiene un nivel de drama de opera que no te sorprendería… bueno, no lo quiero arruinar, pero piensas que cualquier cosa podría pasar.
E: ¿Hay alguna historia divertida detrás de cámaras que nos puedas compartir?
D: Todo el elenco fuimos juntos a Disneyland, algunos nunca habíamos ido. Definitivamente yo no estuve a cargo de organizar esto, pero algunos de los actores más trabajadores planearon este increíble viaje e incluso coordinamos nuestros atuendos, íbamos todos del mismo color y pasamos el día explorando y subiéndonos a los juegos. Yo sólo había ido una vez, pero fue muy divertido ir en grupo.
E: ¿En dónde veremos a David Corenswet próximamente?
D: Tengo un par de pequeños proyectos que empecé desde antes, tengo una serie web que hice con un compañero en Julliard llamada Moe & Jerryweather y es como una comedia existencial, la escribimos e hicimos mientras estábamos en la escuela.
Es pequeña y simple, pero muy divertida… algunas personas les gusta porque es rara, solo algunas personas en específico la encuentran chistosa, pero estoy interesado en volver a hacer eso, me gusta dirigir, escribir y hacer cosas, especialmente en un nivel tan bajo… es impresionante pasar de algo como The Politician con tanto presupuesto y personas a un proyecto pequeño con 5 amigos donde nadie sabe bien qué hace, pero te involucras y aprendes. Puede o no que tenga algo en camino que sería a gran escala.

E: ¿Qué hay de hobbies? ¿Qué disfrutas hacer cuando no estás trabajando?
D: Recientemente he estado aprendiendo sobre aviones, descargué un simulador y he estado intentando aprender los básicos de volar, tráfico aéreo y cómo funcionan.
Mi hobbie más reciente, la forma en que mato el tiempo en vuelo largos es que encuentro el feed del tráfico aéreo en línea, entonces puedo escuchar y seguir al piloto y al avión mientras atravieso el país, es un reto divertido.
Tengo que decir que habiendo aprendido tanto de los vuelos comerciales y la complejidad de los aeropuertos, me ha enseñado mucho sobre mi molestia en los retrasos, ahora cuando un avión mío se demora o estoy esperando en el avión, ahora sólo pienso: “es un milagro que estos aviones lleguen a sus destinos”, he aprendido a agradecer y ser humilde en algo tan grande como los vuelos.
E: Por último, ¿qué harías si fueras presidente?
D: Encontrar un buen vicepresidente y ¡renunciar! (se ríe)
Y con esa respuesta tan honesta (e inesperada) David Corenswet se despide de Esquire, dejándonos listos para terminar de ver The Politician y esperando verlo pronto otra vez en pantalla.
Por Constanza Alcocer
Fotos: Zoey Grossman para Netflix
También puedes leer: «Carlos Paéz el sobreviviente de los andes»