Stan Lee está presentando una demanda de $1,000 millones de dólares contra su ex productora POW! Entertainment, por supuestamente conspirar a la leyenda del cómic de noventa y cinco años para firmar los derechos exclusivos sobre su nombre, identidad y semejanza.
La demanda se refiere a la venta de POW! Entertainment en 2017 para la compañía con sede en China Camsing International, un acuerdo de licencia que requeriría la firma de Lee, quien cofundó POW!.
Según la demanda, Lee afirma que el CEO de la compañía Shane Duffy y el cofundador Gill Champion no revelaron los términos completos de la venta, lo que llevó a Lee a creer que el acuerdo no era exclusivo, a pesar del acuerdo que establecía que otorgaría «los derechos exclusivos de usar el nombre, la identidad, la imagen y la semejanza de Lee a nivel mundial a perpetuidad».
Además, Lee estaba afligido por la muerte de su esposa y padecía una degeneración macular avanzada, por lo que era legalmente ciego e incapaz para leer durante ese tiempo. Como tal, la demanda cita a Champion y Duffy como «oportunistas» que aprovecharon el vulnerable estado mental y físico de Lee.
«Lee no recuerda a nadie que le leyera el Documento ilegítimo y, debido a su avanzada degeneración macular, no pudo haberlo leído él mismo», escribe el abogado de Lee en el documento de la corte.
«Si bien el documento ilegítimo pretende contener la firma de Lee, Lee nunca lo firmó a sabiendas. O Duffy, Champion, Oliveraz [sic] o POW! (1) forjó las firmas de Lee; (2) levantó la firma de Lee de otro documento y lo impuso en el Documento ilegítimo; o, (3) alguien, probablemente uno de los Demandados, indujo a Lee a firmar el Documento ilegítimo usando una táctica de cebo y cambio: decirle a Lee que era otra cosa.»
Jerardo Oliveraz es el ex gerente comercial de Lee, quien también está siendo demandado por fraude por $20 millones de dólares.
La demanda argumenta además que Lee nunca habría aceptado firmar los derechos exclusivos de su nombre a Camsing International, citando el hecho de que Lee no le daría a Disney los derechos sobre su nombre cuando el estudio compró Marvel por $4 mil millones de dólares en 2009.
También se alega que la compañía se hizo cargo de las cuentas de redes sociales de Lee y lo suplantó sin que él lo supiera. Fue hasta el día de ayer que Lee hizo su primer tweet real con un post de seguimiento pidiendo a sus fanáticos que lo protegieran.
Help! Someone has hijacked my Facebook and Instagram. I want everyone to know whoever is writing them is a fraud and is impersonating me. How do I get them back? Can you guys help?
— stan lee (@TheRealStanLee) 15 de mayo de 2018
From now on, I will depend on you, my dear fans, to protect and defend me. I love you guys and am so happy I have control of my twitter account back. You guys are my true superheros.
Excelsior!
Stan— stan lee (@TheRealStanLee) 15 de mayo de 2018
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