La cantante Björk inició sus conciertos en México con su show Cornucopia, te damos los detalles de su primera presentación.
Por Mariana Mijares
La Cornucopia es un símbolo de abundancia y prosperidad, suele estar representada como un cuerno repleto de flores y frutos. De la misma manera, Björk’s Cornucopia -que inició presentaciones en México el sábado-, gira en torno a la naturaleza. Concepto presente en los visuales ideados por Tobias Gremmler, los instrumentos y atuendos de los músicos, y por supuesto, en el siempre característico y original vestuario de la cantante islandesa que regresó a la CDMX por segunda ocasión para presentarse ante 3,997 espectadores, de acuerdo a la cifra oficial.

Después de una breve introducción del coro mexicano Staccato, el show de la artista con más de cuatro décadas de trayectoria que tuvo una corta residencia en The Shed, en Nueva York, inició en el Parque Bicentenario a las 20:15 horas. En ese momento apareció detrás de un enorme telón constituido de cientos de hilos azules para entonar “Family”, a la par que proyecciones circulares y en forma de estrella se mostraron en el show dirigido por la cineasta argentina Lucrecia Martel.
Enfundada en un vestido corto de manga larga en tono rosa claro que tenía detalles que asemejaban flores, portando medias blancas, zapatos de plataforma, y peluca en tono melón, la intérprete continuó con “The Gate”. Detrás de ella, Viibra, el septeto de flauta compuesto por jóvenes que lucían atuendos en tonos azul y rosa pastel y que portaban una especie de alas, se movieron al ritmo de éste, el primer single del disco Utopía.
A continuación, un arpa, la batería y un sintetizador, además de visuales que mostraban plumas en movimiento, acompañaron el tema homónimo del álbum: “Utopía”, en el que la artista se acercó a la audiencia dejando ver una máscara; como también porta en su video.

El repaso de una trayectoria que inició hace cuatro décadas
Luego de tomar un poco de té y agua, la artista se metió a una especie de cabina desde donde la resonancia permitió que entonara “Show me Forgiveness”. Gracias a las bocinas dispuestas en el inmueble, el sonido viajaba continuamente de atrás para adelante y a la inversa, como si se tratara del sistema surround una sala de cine.
Entre flores moradas y amarillas, la compositora que ha colocado 31 singles en los tops más importantes del mundo, siguió con “Venus As A Boy” de su álbum Debut, que fuera lanzado en julio de 1993.
En “Claimstaker”, Björk volvió a interpretar desde la pequeña cabaña mientras en el escenario se proyectaron ramas que se asemejaban un nido; y para cuando salió, recibió una fuerte ovación que incrementó al escucharse las primeras notas de “Isobel”, uno de sus temas más conocidos y que se deriva del álbum Post. La letra cuenta la historia de un personaje que nació mágicamente en un bosque, que sorprende y asusta, y quien envía un mensaje la gente de la ciudad. La historia de Isobel continúa en «Human Behaviour» y «Bachelorette», formando una trilogía.
Al concluir este tema que en Cornucopia se escuchó con nuevos arreglos, Björk se dirigió por primera vez a la audiencia para decir: “Gracias”, recibiendo una gran ovación como respuesta.

El pensamiento de Björk a escena
El público quedó en completo silencio cuando en lugar de notas musicales, se escucharon sutiles movimientos de agua producidos por el percusionista: Manu Delago, quien, desde un contenedor de vidrio, vaciaba agua desde unos recipientes en forma semicircular para anteceder “Blissing me”.
Luego se hizo una breve pausa en la que en la pantalla se presentó una serie de ideas relacionadas con un tema importante para Björk: el cambio climático, la importancia del acuerdo de París y fomentar a un mundo donde la naturaleza y la tecnología estén en armonía; un contexto que podamos imaginar un futuro, y ser parte de él.

El Parque Bicentenario volvió a vibrar con las reverberaciones de “Body Memory”, en donde -y como indica la letra del primer párrafo-, cayó nieve, que alcanzó a la cantante que se colocó al centro de una estructura en forma cunicular y en la que la rodearon cuatro jóvenes que soplaban en el círculo metálico que fungía como instrumento de viento.
La interpretación de la artista resultaba tan magnética, que la audiencia permanecía abstracta, y respetando en su mayoría la petición que suele hacer Björk de que no se empleen celulares en sus conciertos.

México también estuvo presente
La agrupación de la CDMX: Staccato (que pertenece a la Dirección General de Música de la UNAM y que está integrado por estudiantes de dicha universidad) continuó acompañando a Björk en los coros de “Hidden Place”, por lo que recibieron un efusivo aplauso de la audiencia. El coro se mantuvo para “Mouth’s Cradle”, que se distinguió por los sonidos producidos en un gran tambor y cuyas notas no sólo se escucharon, sino se sintieron en las butacas ubicadas cerca del escenario.
En una pausa, un asistente del concierto le gritó a la artista: “Te Amo”, e irónicamente, el tema que continuó fue “Pagan Poetry”, que incluye las letras “I love him, I love him”; por este detalle, coincidental o no, la cantante fue muy aplaudida.
Luego de entonar “Losss” -que estuvo acompañado por las imágenes del video musical- y “Sue Me”, se proyectó un video de Greta Thunberg, la joven sueca que se ha dedicado a generar conciencia hacia el calentamiento global y quien inició el movimiento Juventud por el clima. En el mensaje que grabó para Cornucopia, habla sobre ser más conscientes y no robarles a los niños el futuro, a la par que recordó que el verdadero poder está en la gente.
En este contexto, y luego de que una asistente gritara “Ni una más”, se ovacionó un momento que recordara los acontecimientos ocurridos en estos días a raíz de la marcha de mujeres ocurrida el viernes.

Mensajes que motivaron al cambio
Precisamente, para la última parte del concierto, la cantante volvió ataviada en un elaborado vestido blanco que tenía flores y hojas que se complementaban con imágenes del video “Tabula rasa”; cuyas letras motivan a una revolución femenina (Let’s clean up: Break the chain of the fuck-ups of the fathers. It is time: For us women to rise and not just take it lying down. It is time: The world is listening).
El mensaje de unidad y cambio se reforzó en “Future Forever”, que habla de imaginar un futuro y ser parte de él. Al final de éste presentó a sus músicos: el septeto de Flauta; Arpa: Katie Buckley; Percusión: Manu Delago y Electrónica: Bergur Pórisson, y al coro mexicano que recibió un animado aplauso.

La despedida: en el amor somos inmortales
Luego de casi dos horas de concierto, la velada concluyó con “Notget”, tema del álbum: Vulnicura y en el que Björk motivó a los asistentes a ponerse de pie y bailar con ella, instrucción que el público acató feliz para despedirla entre brincos y aplausos.
Cornucopia se presentará nuevamente los días 20, 23, 27 y 20 de agosto, a las 20:30 horas. Aún hay boletos disponibles.