Quizás estos alimentos sean los responsables de tu fallida dieta o algún que otro problema de salud. Conoce qué te afecta de mala forma.
5 comidas que crees que son sanas y que tomas a diario -pero te equivocas-
Un buen marketing, una creencia que te han transmitido, una bonita presentación y et voilà: catalogamos como sano sin pensar dos veces a determinadas comidas que, efectivamente, no lo son tanto -o al menos alguna versión de la misma-.n¿Cómo evitar caer en esta trampa alimenticia? Infórmate y confirma los ingredientes de lo que incluyes en tu dieta, algunos te sorprenderán. Aquí las cinco comidas que te harán de todo, menos bien.
Jugo
¿Quién dijo proteínas y minerales? Es posible que la fruta original lo contuviera, pero el proceso por el que es sometido -incluido quitarle la cáscara- hace que quede nada proteico, de hecho, más bien azucarado. Prueba a tomar un smoothie casero hecho con fruta natural -además, sabrá más sabroso-.n
Yogurt
Llamados a ser el postre por excelencia que toman desde niños a ancianos, su contenido en ocasiones iguala al de la glucosa de una lata de refresco de cola. Definitivamente no es la mejor forma de empezar el día. Sustituye este producto por un poco de queso natural o pavo a media mañana.n
Granola
Creída comúnmente como alimento saludable, es una fuente increíble de calorías innecesarias. ¡Aproximadamente unas 500 por medio bol! Y eso sin contar la leche o los alicientes con la que la tomes. Azúcar que no te viene nada bien.
Sushi
Todos pensamos que el omega 3 del pescado y el arroz son nutrientes que no pueden afectarnos, y llevas razón. El problema con este platillo japonés acaece cuando tomamos una versión “americanizada” que incluye quesos grasos, tempura altamente calórica o especias. Piénsalo, ¿sigue sonando sano?n
Barritas de granola
Una alternativa “dietética” que no mejora en absoluto. Se convierten literalmente en bombas de glucosa que son realmente bajas en proteínas. De hecho, alberga unas 200 calorías por cada 4 gramos de proteína. Sácalas de tu dieta, de hecho su sabor ni siquiera merece la pena.n
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